Skinstrument II, una propuesta sonora de arte tecnológico y participativo

Daan Brinkmann nos ofrece Skinstrument II, donde utiliza la resistencia de la piel como parámetro para generar sonido

El contacto humano como fuente de sonido electrónico es la base de la propuesta artística del creador holandés Daan Brinkmann que actualmente se expone en el Espacio Fundación Telefónica de Madrid. De hecho, la instalación lleva el descriptivo nombre de Skinstrument II, el “instrumento de piel”.

Resulta notable cómo las más recientes tendencias artísticas suelen presentar grandes rasgos comunes, como el creciente carácter de performance de las obras, el uso intensivo de tecnología en los montajes, y finalmente, el otorgarle al público la facultad de interactuar con la creación del artista.

De esta forma el arte actual se convierte en un medio inmersivo en el que el visitante puede participar activamente en la propuesta creativa del autor generalmente gracias a nuevas tecnologías.

Skinstrument II responde completamente a este planteamiento. Se trata de un instrumento musical que utiliza la resistencia de la piel como parámetro para generar sonido. La instalación se compone de cuatro postes de alrededor de un metro de alto coronados por semiesferas metálicas. Cuando alguien toca las semiesferas se convierte en parte de un circuito electrónico que transmite una pequeña corriente eléctrica, imperceptible para el usuario.

SkinstrumentII

Al entrar en juego varias personas (pueden participar hasta cuatro), el contacto entre unos y otros hace que el circuito genere un sonido electrónico, que variará en volumen y frecuencia en función de la intensidad del contacto. De esta forma, se puede experimentar en la forma de tocar los participantes buscando distintas modulaciones del sonido.

Daan Brinkmann se define a sí mismo como un artista multimedia que utiliza los elementos audiovisuales como un medio para lograr crear experiencias sociales novedosas. Sus montajes forman parte de una exploración permanente sobre las relaciones entre el ser humano y la tecnología. La luz, el sonido y el movimiento inundan los sentidos persiguiendo una reacción del perceptor.

Este creador defiende que la tecnología está transformando el mundo en que vivimos y que tenemos que experimentar con ella, adaptándola a nuestra realidad cotidiana. No debemos concebir la tecnología como algo aparte, aislado en un compartimento estanco, sino humanizarla y adaptarla a las personas.

A pesar de haber expuesto en galerías artísticas y museos, como el prestigioso Stedelijk Museum de Amsterdam, las creaciones de este autor a menudo se pueden ver en espacios públicos, en donde los propios viandantes se convierten en protagonistas de sus obras.

Skinstrument-II

Este es el caso de Upside Down, que consistió en instalar un juego de luces de colores en la escalera acristalada de un céntrico edificio de La Haya y asociar su variación cromática al paso de los peatones o bicicletas que atravesaban la plaza Spui. De esta forma, cualquier paseante que entraba en la zona sensible, iluminada con un foco de color rojo, podía ver cómo a su paso el edificio variaba el color de las luces de la escalera.

En esta misma línea creativa, Cellwise es una proyección sobre el edificio del Ayuntamiento de La Haya que simula cambios en la fachada a través de una estructura de celdas creadas con un haz de luz. Es una pura ilusión óptica que genera la sensación de que el edificio adquiere vida orgánica que le hace evolucionar y cambiar.

Concebido como un proyecto algo más modesto, con 16 Pillars Brinkmann pretende emular el efecto en forma de ondas que genera una piedra lanzada en un charco,  a través de una serie de columnas que emiten luz. Cuando alguien irrumpe en el “charco virtual” el efecto se traslada al muro de columnas que empiezan a cambiar su iluminación de un color a otro manifestando la perturbación del entorno.

Volviendo a la obra que nos ocupa,  Skinstrument II se puede visitar en el Espacio Fundación Telefónica de Madrid hasta el 17 de enero de 2014. Hay que reconocer que interactuar con la aplicación supone una experiencia estimulante y curiosa que a nadie deja indiferente.

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