Primero llegaron los coches conectados, después las casas con inteligencia artificial y, ahora, los campos inteligentes. Por fin ha llegado el momento de darle protagonismo a la naturaleza. Telefónica propone Smart Agro, una iniciativa para mejorar los procesos agrícolas y ahorrar costes.
Actualmente, en España el sector de la agricultura consume más del 70% del agua total disponible. Además, utiliza el 60% de la superficie y el 20% es de regadío. Con todo esto, podemos ser conscientes de la importancia que tiene este sector en el día a día.
Existe una creciente preocupación por la sostenibilidad, la trazabilidad y la calidad de los procesos agroalimentarios. Sin embargo, estas producciones no se pueden mejorar con métodos tradicionales. Por ello, se propone un plan de mejora para el entorno agro, ya sea para la ganadería como para la agricultura, en el que se saca el máximo partido a la tecnología.
Smart Agro consiste en una monitorización y una visualización georreferenciada de datos de los activos del campo que permite una actuación eficaz en tiempo real. Con este nuevo sistema, impulsado por el área de Soluciones Sectoriales M2M, se pueden habilitar nuevos modelos de negocio, mejorar todos los procesos operativos y ahorrar gastos.
La propuesta Smart Agro nace por la necesidad del agricultor o ganadero de mejorar todos los procesos diarios que conlleva su trabajo. Así, esta iniciativa es la suma de diferentes capacidades tecnológicas hechas a medida para cada cliente. Garantiza una mayor productividad con una reducción de un 30% del trabajo administrativo.
Ventajas en explotaciones ganaderas
Principalmente, permite la optimización de los procesos de reabastecimiento y fabricación de los piensos animales. Además, favorece el conocimiento de cuánto está consumiendo la cabaña. Asimismo, posibilita el control de la temperatura y la humedad en las granjas, con la capacidad de medir otros parámetros físicos y ambientales que puedan resultar de interés.
Ventajas en explotaciones agrícolas
Uno de los mayores puntos fuertes de este desarrollo es la actuación en riego y sensorización del terreno con acceso en tiempo real a la información de los sensores instalados en el campo. De forma remota, es posible programar turnos de riego en tiempo real. Por otro lado, favorece la gestión de la información agrícola mediante la visualización georreferenciada de cultivos con capas de información superpuestas sobre los mismos de cualquier lugar del mundo.
Casas con inteligencia artificial, coches conectados que evitan accidentes y, ahora, campos de cultivo y granjas inteligentes. ¿Qué será lo siguiente?
