Este 13 de julio se cumplen dos años del nacimiento de la Fundación ProFuturo, un sueño de Fundación Telefónica y Fundación Bancaria “la Caixa” para conseguir mejorar la calidad educativa de la infancia en entornos vulnerables a través de la tecnología digital. Para celebrarlo, BlogThinkBig.com te invita a conocer más sobre ello de la mano de su directora general, Sofía Fernández de Mesa.
Parece una paradoja, pero no lo es: en la era digital actual la brecha educativa se está incrementando, y esto es precisamente porque existe el riesgo de una brecha educativa digital. Y parece mentira, pero no lo es, que según la UNESCO todavía hay 61 millones de niños en el mundo con edad para asistir a la escuela primaria, de los cuales, un 30%, es decir, 17 millones de niños, nunca lo hará.
Y con estas coordenadas mundiales que nos dejan perplejos a unos e indignados a otros tantos, ProFuturo ha llegado para quedarse.
ProFuturo es la iniciativa impulsada por Fundación Telefónica, junto con Fundación Bancaria “la Caixa”, para llevar una solución de educación digital integrada a niños y niñas de entornos vulnerables para que entren en contacto con una educación en competencias del siglo XXI.
Un sueño que este 13 de julio precisamente celebra su segundo aniversario, habiendo conseguido llegar ya a alrededor de 5,8 millones de pequeños de 23 países tanto de Latinoamérica como de África y Asia.
Para celebrarlo, BlogThinkBig.com te invita a conocer ProFuturo un poco mejor, de la mano de una de sus principales representantes: su directora general, Sofía Fernández de Mesa.
Objetivo claro: mejorar la calidad educativa de los pequeños
Hacer que la calidad de la educación en los entornos vulnerables mejore, con el apoyo de la tecnología digital, ha sido el objetivo marcado por ProFuturo desde sus inicios. “Y es que, a pesar de los avances registrados en las tasas de escolarización, la calidad sigue siendo una asignatura pendiente a nivel mundial”, asegura Sofía Fernández de Mesa, quien, apoyándose en datos de Unesco, recuerda que la cifra de niños y niñas que, tras pasar 4 años en la escuela, no han adquirido los conocimientos básicos de lectura y matemáticas asciende a 250 millones.
Una realidad que a juicio de la directora general de ProFuturo está conectada con el hecho de que en los entornos donde se opera “una gran mayoría de los docentes no cumplen con los estándares nacionales básicos de formación. De ahí que el foco principal de nuestro esfuerzo sean precisamente los profesores”, matiza Sofía.
La educación digital, el modelo más eficiente para acercar el conocimiento
Para la representante de ProFuturo, la educación digital constituye “una manera eficiente de llevar una educación de calidad a cualquier rincón del mundo”, y por ello, además del “contexto de revolución tecnológica que vivimos en estos días”, se ha elegido este modelo de enseñanza como el más eficiente y “necesario para que los niños se preparen adquiriendo nuevas competencias”.
Una perspectiva sobre la que Sofía Fernández de Mesa sitúa a los docentes como la clave del éxito. Por tal, desde ProFuturo se están centrando los esfuerzos en dar soporte y apoyo continuado al cuerpo docente para capacitarlos, especialmente en tecnologías de la información y metodologías innovadoras de enseñanza, permitiendo así “motivarlos y capacitarlos para la integración de la tecnología en su práctica pedagógica”.
Una clara misión por bandera
Poniendo foco en el profesorado, ProFuturo no se olvida del principal cometido. “Nuestra misión es mejorar la calidad educativa de niños y niñas en entornos vulnerables a través de tecnología digital, y nuestro objetivo es llegar a 10 millones en 2020”, asegura su directora general.
“Diría que el principal reto que afrontamos es la adopción por parte de los profesores de estas herramientas digitales educativas. Se trata de que las perciban como un apoyo que les haga más fácil su día a día en clase”, afirma Sofía Fernández de Mesa, que ve necesario para conseguir tal reto “una formación adaptada a los distintos niveles de familiaridad de estos docentes con las tecnologías digitales”.
Pero además de este gran reto, ProFuturo también cuenta con otros desafíos en los que invierte parte de su tiempo: la respuesta a la precariedad de las infraestructuras, como son el acceso a la conectividad y energía en zonas remotas, que pasan por buscar soluciones innovadoras; y el establecimiento de alianzas sólidas para avanzar desde el punto de vista educativo, desde la operación, desde la propuesta tecnológica, y desde lo institucional en su relación con las autoridades educativas locales.
Los socios, una parte clave del equipo de ProFuturo
Para lograr la igualdad de oportunidades de formación entre la infancia,** independientemente del lugar del mundo en el que se haya nacido**, el proyecto ProFuturo no está solo. Sus socios sobre el terreno son la clave. “En América Latina, contamos con las Fundaciones Telefónica locales, y en África y Asia hemos elegido aliados que forman parte de esta iniciativa desde una perspectiva de colaboración mutua”, asegura Sofía, haciendo hincapié en la intención de que el programa perdure más allá de la intervención de ProFuturo, “de manera que entre todos logremos un cambio sistémico para generar oportunidades reales de futuro”. Un cambio que ya ha comenzado a verse en estos dos años de trabajo “intensos, apasionantes y fructíferos en el avance e implantación del programa”.
Y e esta labor, si Sofía Fernández de Mesa tuviera “que resaltar algo, sería el trabajo de los equipos para conseguir estar presente en 23 países con una oferta integral que se pueda adaptar a cada contexto donde operamos, así como el haber llegado a más de 5,5 millones de niños”.
Los datos se suman al proyecto
Los datos son esenciales en la actualidad. La información que de ellos se desprende puede ser útil para mejorar la vida de las personas, y la llegada del Big Data así lo demuestra.
Una tecnología con la que también cuenta ProFuturo. “Nuestro trabajo no tendría sentido si no medimos nuestro impacto y conseguimos tener un proceso de mejora continua para poder ir adaptándonos e innovando en función de las necesidades tan cambiantes en un mundo digital”, asegura la directora general del proyecto, que ha contado con herramientas de “learning analytics” y la ayuda del equipo de ‘Big Data for Social Good’, además del ‘expertise’ de Telefónica, como parte de la «clave del éxito».
Nuevos escenarios de actuación
ProFuturo va más allá de las fronteras. Latinoamérica, África y Asia son parte de escenario de actuación donde el contexto social y educativo del país influyen a la hora de decidir dónde centrar los esfuerzos. “Tenemos en cuenta aspectos como el IDH, o los niveles de alfabetización y la existencia de políticas educativas”, asegura la directora general. «Además, confirmamos la viabilidad desde el punto de vista operativo, y por último aseguramos el establecimiento de acuerdos con socios locales fuertes y con experiencia”.
Bajo este contexto, tanto África como Asia se han convertido en dos escenarios de importante actuación, dado que en ellos “la brecha es mayor”. “Nuestra visión es conseguir que, con independencia del país de origen, todos los niños puedan un día tener acceso a la misma calidad educativa”, ayudando así a disminuir un problema que nos afecta a todos como son los casos de inmigración forzosa, “un tema de actualidad en la agenda pública de muchos países, y que hay que abordar con soluciones realistas, prácticas y eficaces”, enfatiza Sofía.
Las prácticas esenciales de Profutro para lograr la transformación educativa
Lograr los objetivos marcados no es fácil. En el camino son muchas las trabas que pueden sucederse, pero saber cómo afrontarlas es vital para el progreso. Unas prácticas que en los dos años de trabajo de ProFuturo se han tenido muy presentes para tratar de alcanzar la transformación educativa perseguida. “La medición del impacto, la mejora continua de los procesos, así como el soporte presencial y el foco en el docente” son las claves que Fernández de Mesa enumera al recordar este tiempo de trabajo.
“En estos dos años hemos aprendido mucho, pero hemos tenido la suerte de no empezar de cero y nos hemos podido nutrir de esas mejores prácticas que tanto Fundación Telefónica como Fundación Bancaria La Caixa tienen después de tantos años trabajando por el desarrollo de los países que más lo necesitan”, comenta la directora general de ProFuturo.
ODS, un sueño transversal
Con los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por Naciones Unidas en la mente, ProFuturo contribuye de manera directa con el cuarto de ellos: la educación de calidad. Pero no es el único, tal y como Sofía Fernández de Mesa recuerda, “de manera más indirecta también tiene impacto en el 5 (igualdad de género), el 10 (reducción de las desigualdades), y el 17 (alianzas para lograr nuestros objetivos)”. Unos objetivos que hay que convertir en transversales a partir de una idea: hacer que los docentes impartan sus clases, tomándolos como referencia.
Palabras y pensamiento de la directora general de ProFuturo en este 13 de julio, día en el que todos celebramos el segundo aniversario de este proyecto al que deseamos muchos éxitos futuros.
