La presencia de Tesla en China está a punto de incrementarse sensiblemente con una inversión de 1.400 millones de dólares en una gigafábrica en Shanghái.
La compañía de Elon Musk se prepara para dar el gran salto: podremos ver a Tesla en China. Aquel que todo fabricante se presta a dar en algún momento, cuando mira hacia su madurez. Tesla construirá una gigafábrica de baterías en China , concretamente en Shanghái. Será la primera piedra, al menos la más grande de momento, de una expansión que se inició cuando la compañía permitió a los compradores del gigante asiático reservar el Model 3.
La primera gigafábrica de Tesla en China, en colaboración con Panasonic , ha dado buenos resultados. Tras una cuantiosa inversión, el complejo industrial produjo 600 millones de celdas de baterías en dos años. Todo un récord para una planta pionera, por dimensiones y objetivos.
En China, Tesla tiene una nueva meta. En este caso se trata de surtir al mercado del gigante asiático. La compañía ve en el país un inmenso caladero para sus ventas. Pues los coches eléctricos se venden y mucho allí. El gobierno ha apuntalado el nuevo mercado de los eléctricos con incentivos al consumo y con estímulos para el establecimiento de puntos de carga.
China es un terreno abonado y Tesla no se lo quiere perder. Por eso h a levantado 1.400 millones de dólares de bancos chinos. La finalidad principal: construir su gigafábrica en Shanghái. Aunque la compañía también hará por expandir su red de ventas.
La de Shanghái es la cuarta gigafábrica de la compañía que ha sido anunciada , está en construcción o existe. Una se encuentra en el estado de Nevada, otra en Búfalo (estado de Nueva York) y otra cerca de Berlín.
China, fábrica y mercado para los eléctricos
El gigante asiático se ha constituido con el paso del tiempo en el principal mercado de coches eléctricos con mucha diferencia. Y es que en China se fabrican automóviles, ahora cada vez más, eléctricos. Las grandes marcas están presentes en el país, que también tiene fabricantes nacionales. No solo eso. China es asimismo un enorme centro de producción de baterías.
Pero el país también ha conseguido crear un sólido mercado para estos vehículos. La apuesta de Tesla en China es altamente arriesgada por el entorno competitivo. Hay marcas chinas de cierta relevancia que en estos momentos copan las ventas de coches eléctricos a nivel nacional. Pero la demanda es grande. En los diez primeros meses de 2018 casi se duplicaron las ventas. Un indicador de tantos que sirve para tomar el pulso al sector, fuertemente incentivado desde las autoridades de transporte del gobierno.
Imágenes: Tesla