Ya está aquí el día más esperado del año en el calendario Apple, el día de la presentación del nuevo iPhone X.
Llegó el gran día del año y la década para Apple, pues hoy se presentan los nuevos iPhone. ¿Qué hace tan especial el lanzamiento? El hecho de que se han cumplido 10 años desde que Steve Jobs desvelara que el iPhone no eran tres dispositivos separados, sino sólo uno. Aunque en estos 10 años se han lanzado más de 10 iPhones, porque llegaron los más económicos (5c y SE) y los grandes (Plus), la presentación de hoy es muy importante porque el nuevo iPhone X va a romper muchos esquemas.
En base a los últimos detalles que se conocen, procedentes de la versión final filtrada de iOS 11, se espera que se lancen tres dispositivos, que serían llamados iPhone 8, iPhone 8 Plus y iPhone X. Los dos primeros serían sucesores naturales de los iPhone 7, y el X, sobre cuyo nombre hay ciertas especulaciones de que no sea el final, sería el gran terminal innovador para lo que ha sido la familia hasta ahora.
Nunca Apple ha quitado tantas cosas ni puesto tantas funciones nuevas como parece que va a llevar el iPhone X. Después de mucho tiempo, Apple va a integrar en él la para muchos esperada carga inalámbrica, que a otros tantos decepcionará porque no es realmente inalámbrica, en el sentido de que no se puede usar lejos de un cargador. El iPhone X no perderá el puerto de carga como el 7 perdió el jack de audio, pero en el seno de Apple estas cosas indican que en cuanto pueda, la compañía abandonará todos los puertos.
La siguiente gran cosa que llegará con el nuevo iPhone X es Face ID, un sistema de reconocimiento facial que podría ser revolucionario en el seno de la industria, pues podría detectar el rostro de los usuarios desde ángulos muy complicados, funcionar sin luz, etc. Todo ello sería gracias a la inclusión de sensores infrarrojos especiales en el frontal del dispositivo. A su vez, esto nos lleva a la posible eliminación de Touch ID, el sistema de identitificación de huella dactilar. La razón tiene que ver con el próximo punto.
El iPhone X se unirá a la tendencia del «todo pantalla», y para ello es necesario eliminar los botones en el frontal. Touch ID podría llegar integrado en la pantalla, pero parece poco probable a día de hoy. Será el iPhone menos reconocible hasta ahora, pues además integrará pantalla OLED, otra de las grandes tendencias fuera de Samsung, que siempre ha apostado por esta tecnología.
La parte más interesante del todo pantalla radicará en cómo Apple sustituye el botón físico. Se conoce por el software filtrado que en iOS 11 en los nuevos terminales imperarán los gestos. Cada aplicación tendrá una línea inferior dibujada sobre la que se podrá deslizar hacia arriba para salir de ella o abrir la vista de multitarea. Es el mayor cambio producido en iOS desde hace mucho tiempo y será interesante ver cómo se transmite su uso a millones de usuarios.
Por último, esperamos que todo llegue en un cuerpo de 5.8″ que de nuevo acoja la doble cámara en su parte trasera, pero en vertical en lugar de en horizontal, para supuestamente captar e insertar mejor contenido en realidad aumentada.
Sobre el precio sólo cabe esperar, pues todo lo demás son elucubraciones. Dentro de ellas, se habla de más de 1.000€ de precio base.
