Una nueva ciudad tecnológica se está alzando en Toronto (Canadá) como modelo de urbanismo del siglo XXI. Una idea a la que ya se han sumado otras grandes urbes. ¿Quieres saber cuáles? Aquí te las presentamos.
La ciudad tecnológica se está convirtiendo en una de las grandes apuestas de futuro. Son muchas las empresas que encuentran en las grandes urbes una importante fuente de explotación en busca de la creación de sociedades más seguras, sanas y divertidas.
Una apuesta que ya está presente en muchos puntos del mundo, y que ahora también se lanza en Canadá. La ciudad de Toronto ha sido la elegida por Sidewalk Labs, firma propiedad de Alphabet, matriz de Google, para construir en su muelle una nueva ciudad tecnológica.
Un modelo de urbanismo del siglo XXI
Pasar de un área en desuso a una mini metrópolis llena de vida será el objetivo buscado para la ciudad de Toronto. Convertirla en un modelo para el urbanismo del siglo XXI donde desde Internet se construya una nueva idea de ciudad conectada que favorezca la integración, seguridad, diversión, y un ambiente más sano.
Para ello, se confiará en la recopilación de datos a través de sensores que permitan conocer más sobre el tráfico, el ruido, la calidad del aire, o el rendimiento de la red eléctrica y la recolección de residuos, entre otros.
Una ciudad con el verde por bandera
Convertirse en una ciudad verde es la prioridad del proyecto tecnológico de Toronto, donde los planes de construcción ecológica serán los protagonistas.
Pero, ¿qué nuevas ideas se aportarán para ello? Al menos un par. Y es que ya se ha pensado en los sensores como ayuda para separar los desechos en el proceso de reciclaje. Además, un piloto asistente para orientar a los vecinos a la reutilización de las aguas grises, las procedentes de lavabos, duchas, baños y lavadores, ya está en marcha.
Ideas de futuro a las que también se añaden la implementación de automóviles sin conductor, controlados por una aplicación; la reimaginación de edificios a través de estructuras fuertes (madera, no acero), pero interiores flexibles; o el control del clima para animar a los ciudadanos a sacar el máximo partido al espacio al aire libre.
Las otras ciudades tecnológicas
Toronto es tan solo la última ciudad en unirse a la larga lista de grandes urbes tecnológicas. Un elenco de más de 150 ciudades que han servido de inspiración para este proyecto, y entre las que se encuentran Barcelona o Santander, una de las ciudades más inteligentes de Europa tras más de casi una década apostando por la tecnología como vehículo de crecimiento y desarrollo.
Además de ellas, entre las 25 ciudades más tecnológicas del mundo se encuentran, según el último informe elaborado por la revista Business Insider, en colaboración con 2thinknow, 10 urbes procedentes de Estados Unidos, 6 de Europa, y 9 de Asia.
El pódium del ránking está encabezado por San Francisco, sede de Silicon Valley. Su gran cultura de startups y su alta población de diseñadores y programadores han alzado a esta ciudad estadounidense como la más tecnológica en la actualidad.
Le siguen muy de cerca Londres y Nueva York. La capital británica se está convirtiendo en una seria amenaza para San Francisco debido a que tanto el número de startups como la tasa de crecimiento de programadores no paran de aumentar. Tanto es así que las estimaciones de futuro ya datan en 11.000 el número de futuros trabajos tecnológicos que la urbe británica creará para la próxima década.
La alta cantidad de empresas de alta tecnología y la numerosa cantidad de servicios de tecnología integrada han hecho que Nueva york se perfile como la tercera ciudad tecnológica más importante del mundo.
Ahora solo cabe preguntarse si con el tiempo Toronto también podrá llegar a situarse dentro de este pódium honorífico.