La multiplexación de pixels a alta velocidad simultánea permite componer una imagen final en alta resolución sin incrementar los requerimientos de ancho de banda
Los recientes avances en materia de sensores de imagen desarrollados por el departamento de óptica e imagen digital de la Universidad de Oxford, han germinado en un nuevo prototipo denominado TPMi que podría revolucionar la tecnología de los sensores de imagen del futuro. Se trata de un nuevo sistema denominado Temporal Pixel Multiplexed Imaging, una tecnología capaz de ofrecer imágenes de alta resolución sin aumentar los requisitos de ancho de banda.
Los sensores de imagen son chips integrados por una matriz de elementos fotosensibles como fotodiodos o fototransistores que transforman en señales eléctricas la luz de una imagen proyectada desde un objetivo, para luego ser analizadas y representadas como un patrón, ya sea analógico o digital.
La innovación introducida por los de Oxford, bajo la dirección de Gil Bub, consiste en dividir la matriz de fotodiodos o píxeles del sensor en grupos de fotorreceptores más pequeños, con el objeto de efectuar la exposición de cada grupo de forma secuencial durante la captura de una imagen y realizar un posterior multiplexado de la información temporal registrada por los diversos grupos para recomponer una imagen completa.
La multiplexación de pixels a alta velocidad simultánea permite componer una imagen final en alta resolución sin incrementar los requerimientos de ancho de banda y, según se desprende de los resultados obtenidos por el equipo de investigadores, con este sistema es posible ganar en resolución y rango dinámico sin incrementar el ruido, en comparación con un sensor de lectura total.
La ventaja de esta técnica es que esta tecnología se conoce desde hace años, ya que la captación de luz es muy similar a la utilizada por los chips DMD –Digital Micromirror Device– para generar imágenes 3D con la técnica de iluminación de multiplexación para la captura de imágenes.
Para la demostración de esta tecnología, el equipo de Bub ha desarrollado un prototipo de este sensor que ha ensayado con éxito con ejemplos macroscópicos y microscópicos, incluyendo imágenes transitorias de calcio en las células del corazón a 250 Hz.