HyperSurfaces es la creación de un grupo de ingenieros que han sido capaces de que, usando sensores de vibración e inteligencia artificial, cualquier superficie se convierta en una interfaz de usuario. De momento, se han hecho pruebas en coches.
¿Barreras entre lo físico y lo digital? Gracias al largo y duro trabajo de un grupo de ingenieros se ha conseguido que una superficie sin botones ni pantallas se convierta en una interfaz de usuario. HyperSurfaces, como se llama la tecnología, funciona a través de sensores de vibración e Inteligencia Artificial que transforman cualquier objeto y material en un dispositivo capaz de reconocer interacciones físicas. Un avance que puede significar una uténtica revolución.
Los ingenieros ya han probado esta tecnología en coches. En un vídeo explicativo se ve cómo en una de las puertas, el usuario puede hacer cualquier tipo de interacción con el vehículo sin necesidad de un dispositivo. Gracias a los sensores de vibración, el conductor podrá tocar dos veces seguidas una parte de su coche para encender las luces o cerrar las puertas. Un avance más hacia los vehículos inteligentes.
Según explica Bruno Zamborlin, fundador y consejero delegado de la empresa tecnológica que se encarga del proyecto, el objetivo es que con HyperSurfaces no haya barreras entre lo físico y lo digital. “La idea es fusionar los mundos físicos y de datos de una manera más fluida de lo que ha sido posible a día de hoy, deshaciéndonos de teclados, botones y pantallas táctiles innecesarias”, señaló el ingeniero.
¿Cómo se consigue crear esa interfaz de usuario? Gracias a entrenamiento previo para un objeto físico en particular, los algoritmos que trabajan en la red neuronal de HyperSurfaces pueden ejecutarse a través de microchips dedicados que no requieren de conexión a la nube para su procesamiento. En definitiva, esta conexión tecnológica hace que los gestos del usuario puedan reconocerse instantáneamente.
Como decíamos, esta tecnología ya ha sido probada en coches por este grupo de ingenieros. Sin embargo, tiene muchas más posibilidades de utilización. Por ejemplo, se podría utilizar esta tecnología para hacer que la mesa de madera de tu cocina se convierta en un control de luces de la casa o que las ventanas sirvan para regular el aire acondicionado.
¿No te parece increíble?