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La boya submarina que aprovecha el poder de las olas

Los intentos de utilizar las olas como fuente de energía vienen de hace muchos años atrás. Pero desde entonces, aprovechar la energía de las olas para aplicaciones comerciales ha demostrado ser todo un reto, porque los dispositivos son sensibles a las duras condiciones climáticas, tienen un alto coste o simplemente no producen suficiente energía para hacer un proyecto comercial viable.

Sin embargo, la startup escocesa, AWS Ocean, lleva desarrollando sistemas de energía marina durante más de 20 años proporcionando tecnologías habilitadoras y servicios profesionales relacionados al sector emergente de la energía marina. La novedad que ha sido un éxito es que ha construido un prototipo de dispositivo que consiste en una boya submarina que podría alimentar hogares al capturar la energía del océano. Esta innovación escocesa recibe el nombre de Archimedes Waveswing.

La misión de la boya submarina

El Archimedes Waveswing consiste en una boya submarina de 50 toneladas que se encuentra atada al fondo del océano y debajo de la superficie del agua, ubicado frente a las Islas Orcadas de Escocia. Existen distintas aplicaciones de las boyas marinas, pero esta se trata de una boya submarina que utiliza la fuerza de las ondas que pasan para generar energía y su ubicación submarina le ayuda a evitar daños por las duras condiciones climáticas. Se espera que el periodo de prueba concluya antes de que finalice 2022.

La boya submarina de energía undimotriz es el resultado de 20 años de investigación y desarrollo y es reconocida como uno de los conceptos más prometedores para la generación comercial de energía renovable a partir de las olas del océano. Algunas de las futuras funciones que más destacan de este nuevo proyecto son:

  • La aplicación de energías remotas, como la alimentación de activos de campos petrolíferos submarinos y monitoreo oceanográfico.
  • En cuanto a su aplicación para la energía a escala de servicios públicos, se pretende su contribución a suministros de energía renovable.

¿Por qué ha sido un éxito dentro del sector de la energía marina?

El convertidor de energía de las olas Waveswing capturó una potencia promedio de más de 10 kW y picos de 80 kW, durante un período de condiciones de olas moderadas. Estas cifras superaron las propias predicciones del desarrollador en un 20%, superando todas las expectativas.

Además, a partir de diferentes hallazgos se ha comprobado el alto potencial de supervivencia de la boya submarina que continuó proporcionando energía en condiciones climáticas adversas, por ejemplo, durante vendavales de gran fuerza. Por otro lado, desde su instalación hasta su pleno funcionamiento se requieren tan solo 12 horas para que este dispositivo pueda comenzar a funcionar correctamente.

Imagen de Unsplash.

El futuro de la boya submarina en la energía renovable

Actualmente la boya submarina se encuentra en el mar en un periodo de prueba que pretende ser finalizado a finales de año. Sin embargo, AWS pretende implementarse de nuevo a principios de 2023 para empezar a realizar más pruebas.

Desde AWS Ocean se cree firmemente que el Archimedes Waveswing es un verdadero negocio debido a su alto potencial de rendimiento que se respalda con datos reales. Por ello, desde la startup están iniciando conversaciones con socios de comercialización o personas interesadas en este proyecto.

Desde la operativa de la startup se está visualizando aplicaciones, como alimentar una infraestructura remota de campos petroleros y acuicultura. Así como proporcionar energía renovable a comunidades marítimas remotas. La compañía tiene como objetivo desplegar su dispositivo en profundidades de agua superiores a 25 metros. Ya sea como una sola boya o para la integración en una estructura de múltiples absorbentes.

El aprovechamiento de la energía de las olas es un área de un gran potencial, ya que este no depende de la luz como la energía solar, o de la fuerza del viento como la energía eólica. Esto significa que podría garantizar un suministro de electricidad confiable, lo que a su vez podría reducir significativamente los precios de la energía renovable.

Imagen de Unsplash.

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