El juego, de mecánica similar a El Precio Justo, ha sido desarrollado por Marc Molins en solitario, mientras lo compagina su trabajo en la startup Onfan.
Estamos ante una revolución desde el punto de vista de los videojuegos. La antigua concepción de que éstos sólo estaban destinados a niños y especialmente a los jugadores, conocidos como “gamers”, ha cambiado radicalmente gracias a los smartphones.
Este giro en el perfil de la masa de usuarios ha hecho que surja un nuevo mercado dedicado a juegos para todos los públicos. Gran parte de estos juegos pertenecen a un género que está totalmente al alza, como los que pueden divertirnos en esos huecos de «tiempo muertos” los llamados «casual games».
Candy Crush, Angry Birds, Dots y un largo etcétera han ocupado los puestos más altos de descargas e ingresos en las tiendas de aplicaciones más reconocidas. Esto ha hecho que cada vez se las tome más en serio dentro del sector.
Todos estos factores animaron a Marc Molins, Talentum en Wayra Barcelona a emprender su propio casual game desde julio. Marc está actualmente programando la app de Android para Onfan, el geolocalizador de los mejores platos. El coworking propio de las incubadoras y startups, así como la gran variedad de miembros dentro de Onfan, le ha ayudado a aprender no sólo de Android, sino también de muchas otras áreas como diseño, SEO o community management, entre otros.
El Precio Justo convertido en casual game
El juego se llama Guess the Price y nos recuerda al mítico concurso televisivo El Precio Justo, donde te reta a adivinar el precio de una serie de productos. La app cuenta de momento con más de 100 productos, divididos en 4 categorías: dispositivos electrónicos, moda, precio de fichajes de fútbol y arte. Para cada partida rápida se muestran 6 productos diferentes y se tienen 3 vidas para cada uno de ellos. Acertaréis si os acercáis en un 10% al precio real del producto, y si además claváis el precio obtendréis unos puntos extra. Por el momento sólo cuenta con versión Android y Marc ya está planeando nuevas mejoras: “Estoy empezando a diseñar los wireframes para un modo multijugador, que creo que puede resultar muy divertido”.
Según afirma Marc, gran parte de la culpa de que esta aplicación esté ahora en Google Play, la tiene Wayra y todas las startups y personas que en ella trabajan. “Siempre he tenido mucha curiosidad y ganas de emprender, pero trabajar en Wayra me ha dado el conocimiento y la inspiración para empezar el casual game Guess the Price”. Además, ha podido interactuar con otras startups, viendo los problemas y errores que cometían, gracias a las reuniones que se realizan cada dos semanas sobre sus avances e hitos.
Por último destacar que la motivación de Marc al crear la app no es ganar dinero, ya que el juego es gratis y sin anuncios, sino ver cómo otras personas pueden desconectar y divertirse gracias a algo que él ha creado.