En un entorno tan cambiante como en el que se mueve nuestra economía, con una situación económica delicada, y con la tecnología evolucionando a pasos agigantados, no hay tiempo que perder. Las empresas necesitan ser ágiles en la toma de sus decisiones. Emplear más tiempo del estrictamente necesario en decidirse puede traer consecuencias muy negativas para el desarrollo del negocio.
Según un estudio que ha realizado Vanson Bourne a petición de la empresa NetApp, el 40% de los directivos españoles afirma que ha perdido dinero y clientes como consecuencia de una toma de decisiones tardía. A este porcentaje, hay que sumar el 34% de los empresarios que señala que el demorarse en decidirse le provocó quedar “fuera de juego” en el sector. Además, uno de cada tres reconoce que cedió terreno a la competencia al no tomar una decisión a tiempo.
La velocidad se acelera en los negocios
Esto no quiere decir que haya que precipitarse y no haya que pensar las cosas antes de emprender un camino, pero demorar mucho la estrategia a seguir trae consecuencias nefastas para la empresa. “Pero la velocidad de los negocios continuará acelerándose, y las empresas que no puedan seguir el ritmo saldrán perdiendo”, señala María José Miranda, directora general de NetApp Iberia.
Según el informe, solo el 11% de las compañías españolas toma las decisiones en un mismo día, mientras que el 39% de las empresas nacionales tarda más de un día en tomar una decisión.
Eso sí, nueve de cada 10 directivos españoles asegura ser consciente de que las decisiones deben ser tomadas inmediatamente como resultado de los rápidos avances tecnológicos. Pero también se vislumbran otras causas. Por ejemplo, el aumento de la competencia es un motivo para tomar decisiones rápidas para el 64% de los empresarios, mientras que para el 53% la incertidumbre económica del país les lleva a tener que tomar una decisión con mayor celeridad.
A la hora de tomar las decisiones, sobre todo en materia tecnológica, resulta crucial que las empresas sean capaces de analizar los datos “críticos” o “significativamente importantes” en el proceso de decisión. El 54% de los directivos españoles asegura que los datos son un valor crítico en el entorno empresarial, pero aún así, sólo el 25% de las empresas consulta los datos.
Lento acceso a la información
Pero… ¿por qué? Según el estudio, en el 55% de los casos las compañías encuentran dificultades para acceder a esos datos críticos. Para el 44%, el problema es que el proceso para llegar a la información necesaria para tomar decisiones estratégicas es muy lento. En este sentido, que la empresa esté dotada de una infraestructura tecnológica capaz de proporcionar un acceso ágil y flexible a los datos parece básico para lograr una toma de decisiones estratégica con fluidez.
La encuesta señala que siete de cada 10 directivos españoles considera que el problema que más ralentiza su toma de decisiones está en sus infraestructura tecnológica, que falla a la hora de apoyar las necesidades de la empresa. Para el 46% de los ejecutivos encuestados, la complejidad de los datos es una barrera, y para el 42%, la gran cantidad de ellos que manejan.
Ante esta situación, el 70% de los directivos reconoce que invertir en nuevas tecnologías es básico para mejorar sus procesos empresariales y, por ende, para ser capaces de tomar decisiones de manera más ágil. Aplicaciones móviles, Cloud Computing y herramientas para extraer datos son las tecnologías específicas en las que los directivos españoles se proponen invertir para lograrlo.
Imagen | Forbes.com.
