La entrevista de trabajo es la última fase antes de conseguir un nuevo puesto en una empresa o negocio. En ocasiones son varias para el mismo puesto. Una con un recruiter, otra con el que será tu jefe directo… Pueden ser presenciales o por videollamada. Pero difícilmente te escaparás de ellas para lograr un nuevo empleo. Así que, prepárate, planifica tu estrategia y llega allí listo para dar lo mejor de ti. Además, siempre puedes ayudarte con preguntas comunes en una entrevista o típicas preguntas en una entrevista de trabajo y así saber qué responder.
Y es que algo tan longevo como es la entrevista de trabajo poco ha cambiado. Las bases son las mismas: entrevistador y entrevistado intercambiando preguntas y respuesta. Eso sí. Se han añadido cuestionarios para sonsacarte más información de la que hay en tu currículum, como el test Gallup, el test DISC, los tests psicotécnicos, distintos tests de personalidad… Hay un largo etcétera. Y aunque han cambiado el tipo de cosas que las empresas buscan en sus trabajadores, introduciendo conceptos como skills o soft skills, la idea base es la misma: intentar conocerte en lo que dura la entrevista para saber si encajas en esa empresa y/o en ese puesto de trabajo.
Así que sabiendo de antemano que la entrevista de trabajo tiene ciertos hábitos, preguntas o pruebas que se repiten frecuentemente, antes de hacer una entrevista deberías planificar cómo vas a responder a las preguntas, cuál va a ser tu actitud, etc. Claro está, tampoco se trata de matar la espontaneidad y la improvisación, a las que seguramente tengas que acudir en algún momento quieras o no, pero cuanto mejor te prepares, más herramientas tendrás para salir satisfecho de esa entrevista.
Las claves antes de la entrevista de trabajo
Antes de una entrevista laboral es inevitable que hagamos “nuestros deberes”. Es decir, hasta el más experto de la improvisación, un cantante, un actor o un humorista, tienen siempre algo preparado para salir del paso si surge algo. Tú no vas a ser menos.
Para empezar, algo tan básico como conocer la empresa a la que quieres entrar y el puesto de trabajo al que aspiras. Cuanta más información tengas al respecto, mejor. Te ayudará a saber qué perfil andan buscando, aunque lo hayan especificado en la oferta de empleo. ¿Qué momento pasa la empresa? ¿A qué retos se enfrenta? ¿Conoces a alguien que ya trabaje dentro y pueda darte alguna información?
Saber qué quieren de ti en la entrevista de trabajo es clave para destacar tus habilidades y puntos fuertes enfocados a ese puesto de trabajo. Es algo que también conviene hacer con el currículum. Adaptarlo a cada oferta solicitada. Seguramente sepas hacer muchas cosas, pero de nada va a servir darlas a conocer si no se ajustan al puesto al que aspiras. En ocasiones puede ser hasta contraproducente.
Tampoco hay que olvidar ciertos tópicos o preguntas comunes en una entrevista que, no por ello, deben respetarse. Normas no escritas que es mejor no saltarse. Puntualidad, apariencia, pulcritud, confirmar la asistencia… Dependerá del puesto de trabajo, pero ir un poco arreglado de vez en cuando, sin pasarse, no está de más.
La actitud frente al entrevistador también es importante. Hay que dar buena impresión sin olvidar que esa persona está ahí para extraer de nosotros más de lo que tal vez queramos y debemos intentar conducir nosotros la conversación en nuestro beneficio. Sentarse bien. Mantener las formas. Ofrecer una actitud educada. No mostrar inseguridad ni ponerse a la defensiva. Son algunas cosas a tener en mente.
Típicas preguntas en una entrevista de trabajo
Aunque pueden variar o plantearse de distintas maneras, hay una serie de preguntas comunes que se repiten en una entrevista laboral. Típicas preguntas de entrevista de trabajo que deberás responder sí o sí. Algunas son inevitables, otras tal vez te sorprendan, pero por lo general, la entrevista de trabajo cumple unos propósitos muy concretos y poco se puede hacer a nivel creativo.
Siempre que se habla de preguntas extrañas u originales en entrevistas de trabajo salen ejemplos de tecnológicas como Google o Facebook. Más que preguntas, adivinanzas que no dejan de ser anécdotas sacadas de contexto y que ya no se utilizan salvo como extravagancia o para romper el hielo con el entrevistado. Si tuvieras superpoderes, ¿cuál te gustaría tener? ¿Cómo explicarías a alguien cómo arreglar una rueda pinchada de bicicleta? Si pudieras conocer en persona a un personaje histórico, ¿cuál sería y por qué? ¿Cuántas pelotas de tenis caben en un avión? ¿Qué harías si fueras el único superviviente a un accidente aéreo?
Por lo general, las preguntas en una entrevista son más lógicas que las anteriores. Algunas son tan habituales que parecen más un guiño que una pregunta seria. ¿Cuáles son tus puntos fuertes? ¿Y tu mayor defecto? ¿Dónde te ves dentro de cinco o diez años?
Más preguntas que aparecerán en tu entrevista
Otras de las preguntas comunes en una entrevista de trabajo son inevitables y puedes enfocarlas de muchas maneras. Dependerá de lo que busque la empresa y de lo que quieras destacar de ti. ¿Qué podrías aportar a esta empresa? ¿Por qué deberías ser tú la persona que ocupe este puesto? ¿Por qué quieres trabajar aquí? ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre? Destaca algunos logros personales de tus empleos anteriores.
A partir de aquí, hay una serie de preguntas enfocadas a averiguar aquello que no aparece en tu currículum y que buscan cada vez más las empresas. Lo que hoy en día se llaman soft skills y de las que hemos hablado en varias ocasiones. ¿Te gusta trabajar con otras personas o prefieres el trabajo en solitario? ¿Te llevas bien con la presión o el estrés? ¿Sueles tener iniciativa o prefieres actuar según lo que se te ordene hacer? ¿Eres participativo en las reuniones o prefieres escuchar a los demás? ¿Sueles hacer amistad con tus compañeros de trabajo? ¿Qué dirían tus antiguos compañeros sobre ti? ¿Cómo reaccionas al fracaso? ¿Y al éxito? ¿Qué te motiva en tu día a día? ¿Te gusta el trato personal o prefieres la distancia física? La lista es prácticamente interminable.
Para terminar. Prepararte para una entrevista de trabajo te permitirá reaccionar mejor a preguntas que no te esperabas. No te garantiza que todo vaya bien, pero sí podrás asirte a algo en vez de quedarte en blanco. Obviamente, no hay una entrevista tipo, cada entrevistador es distinto y todo cambia según la empresa y el puesto buscado, pero viendo los ejemplos anteriores podrás ir más tranquilo a tu próxima entrevista sabiendo de antemano qué debes o qué no debes hacer.
