Las habilidades más demandadas en los trabajos del futuro, las denominadas soft-skills, ya se están buscando en los candidatos actuales. ¿Quieres saber cuáles son? ¿Reúnes alguna de ellas? No esperes más para descubrirlo y sigue leyendo.
Las habilidades demandadas por las empresas en la actualidad distarán de las requeridas por las mismas organizaciones para los trabajos del futuro donde la automatización se lanzará a la conquista.
La llegada de las denominadas soft skills ha roto con los esquemas establecidos en los currículums, y además de la formación académica, ahora también tienen peso, igual e incluso superior, aquellas habilidades intrínsecas a la persona en su relación consigo misma, el resto de las personas y el ambiente de trabajo. ¿Sabes a qué habilidades nos referimos? ¿Quieres conocerlas? ¡Vamos allá!
Capacidad resolutiva, pensamiento crítico y creatividad
La automatización de los puestos de trabajo por el progreso de la tecnología no significa el fin de la mano de obra humano. Tranquilidad, que habrá hueco para todos. Tan solo hay que plantearse cómo cambiar y avanzar de manera conjunta. Y es que, hay capacidades que, por el momento, las máquinas no desarrollan tan bien como nosotros.
El toque humano seguirá siendo necesario para la resolución de problemas complejos, el impulso del pensamiento crítico o la creatividad:
-
Solución de problemas complejos: si bien es cierto que las máquinas pueden sacarnos de un apuro bastante más rápido que una persona, también lo es que la tecnología no sabe cómo salir con ellos si los mismos no están adecuadamente definidos. Si la solución no está en su algoritmo o su esquema de resolución, no habrá inteligencia artificial que valga para sacarte del apuro. Una realidad donde las personas sí que pueden ser bien útiles. ¿Por qué? Los humanos cuentan con la posibilidad de detenerse, reflexionar y volver atrás para ver en qué punto arrancar de nuevo para encontrar una solución.
-
Pensamiento crítico: la capacidad de interpretar, así como de imaginar y conectar con el mundo es una habilidad que las máquinas desean de las personas. Aunque están mejorando y progresando en su corriente más crítica, las personas todavía le ganan el juego en este terreno.
-
Creatividad: Picasso, Galdós, Mozart… La capacidad de creación de los autores y compositores es una habilidad «envidiada» a día de hoy por la inteligencia artificial. Lo aleatorio e intuitivo no es su fuerte, e imitarlo no es sencillo. Por ello, esta cualidad humana se ha convertido en una de las más importantes y demandadas por las empresas como marca y cualidad diferencial.
7 habilidades más que tampoco hay que dejar atrás
Sí, no has leído mal el título. Son diez las habilidades que conforman este post, y tras enumerar las tres principales, toma nota de estas otras, también muy útiles para tu futuro.
-
Gestión de personas: más allá de la analítica y las matemáticas, saber gestionar las capacidades de las personas para otorgarles uno u otro puesto, sabiendo sacar el máximo partido de ello, es una habilidad que la tecnología todavía no controla.
-
Coordinación: una comunicación efectiva y la colaboración entre los distintos miembros de un equipo de trabajo serán las bases que conformen una de las habilidades más demandadas en los trabajos del futuro.
-
Inteligencia emocional: aunque compartan parte de su nombre, por el momento, la inteligencia artificial no entiende también como las personas de empatía o curiosidad, dos partes esenciales del racionamiento emocional.
-
La toma de decisiones: no saldrá de una máquina la idea de cambiar de repente de idea, a pesar de que la que vaya a ejecutar ya se haya comprobado que no es la mejor. Si está escrita para ella, la llevará a cabo. Pero, ¿qué clase de persona haría eso? Por este motivo, las empresas buscarán a gente capaz de tomar decisiones por sí mismas teniendo en cuenta las necesidades de la organización y lo mejor para ella.
-
Orientación: el valor de saber ofrecer una buena orientación a los clientes para así proveerles de la mejor solución a sus problemas será una habilidad que se potencie y se demande al alza en el futuro.
-
Negociación: hablar, discutir los distintos puntos de vista y buscar la mejor solución para ambas partes. La negociación es una habilidad humana donde la comunicación se convierte en protagonista, y amoldarse a la situación y a las condiciones se hace inevitable. ¿Es capaz una máquina de hacerlo?
-
Flexibilidad cognitiva: la capacidad de cambiar y adaptarse. Ser flexible en función de los distintos momentos, necesidades y personas con las que se trabaje es esencial para un buen desarrollo del trabajo, tanto a nivel colectivo como particular.
Y tú, ¿reúnes estas habilidades?