La agricultura ecológica está de moda. Antes de lanzarte a plantar tu propio huerto en casa, es importante que tengas en cuenta unos consejos muy importantes.
El regreso a los productos naturales, orgánicos y caseros es una tendencia que ha aumentado considerablemente su popularidad en los últimos años. En este contexto, son muchas las personas que se han aventurado a iniciar su propio huerto ecológico. Más allá de la jardinería como hobby, los huertos caseros son un medio para producir frutas y verduras de forma económica y en un entorno 100% natural y controlado.
En un huerto ecológico se origina todo un ecosistema de biodiversidad saludable que contribuye al crecimiento de plantas y pequeños insectos en el jardín. La agricultura ecológica nos permite reducir el impacto de nuestra la huella ecológica y generar nuestros propios recursos sin la intervención de químicos.
A continuación, te proponemos una serie de consejos clave para que las frutas y las verduras de tu huerto crezcan saludables y nutritivas.
Cuida bien el terreno
Escoge un terreno adecuado para el huerto y asegúrate de que los niveles de acidez del suelo son adecuados y el terreno esté libre de sustancias perjudiciales. Recuerda que la tierra nunca esté demasiado seca ni demasiado húmeda, y que la profundidad no sea superior a 50 centímetros.
Evita los químicos
Los pesticidas, herbicidas y fertilizantes son sustancias dañinas para la cosecha y dificultad el crecimiento de los vegetales. Además, están directamente relacionados con la aparición de numerosas enfermedades y problemas de salud. Es importante encontrar alternativas a los pesticidas sintéticos para garantizar la sostenibilidad del huerto ecológico. Escoge pesticidas muy específicos y que estén destinados para matar los insectos concretos que proliferan en tu huerto.
Utiliza abonos orgánicos
Reciclar la basura orgánica es una decisión de gran responsabilidad con el medio ambiente y uno de los pilares sobre los que se erige todo huerto ecológico. Emplear residuos orgánicos para fabricar abonos y compost resulta de gran utilidad para contribuir al crecimiento del huerto de manera casera, barata y reduciendo el impacto medioambiental.
Algunos de los residuos recomendables para fabricar tu propio abono son las cajas de los huevos, las bolsitas de las infusiones, las hojas caídas de los árboles, la piel de los vegetales o el papel de periódico triturado. Intenta evitar residuos como la carne, la comida cocinada o los plásticos.
Conoce el calendario de siembra
Hay ciertos vegetales que son muy complementarios e impulsan mutuamente su crecimiento y vitalidad cuando se plantan juntos. Algunos buenos ejemplos son las zanahorias junto a las cebolletas, los ajos y las rosas, los tomates y los cebollinos y pepinos junto a los rábanos. Es fundamental tener muy en cuenta el calendario de siembra y las plagas más frecuentes para decidir las frutas y los vegetales más adecuados para plantar en cada estación.
No desperdicies ni una gota de agua
La conservación y el ahorro de agua es otro de los elementos que definen la agricultura ecológica. Una idea muy recomendable es instalar pequeños depósitos para almacenar el agua de la lluvia y aprovecharla para regar nuestro huerto. Además, es importante no desperdiciar agua en el riego, conocer las necesidades de cada vegetal y seguir los correctos hábitos de trasplante. Espera hasta un día nublado o a las primeras horas de día para evitar que las plantas se sequen. La humedad es imprescindible para que el trasplante sea exitoso y seguro.
FUENTE: CFS
