Desde Fundación Telefónica se presentan las nuevas ideas impulsadas por jóvenes que revolucionarán el futuro digital
En estos tiempos inciertos que nos han tocado vivir, cada vez hay más acuerdo en que los modelos de vida laboral heredados del pasado tienen poco sentido en el nuevo escenario emergente. Conceptos como “un trabajo para toda la vida” e incluso “un empleo fijo y estable”, quedan embalsamados como reliquias de otras épocas. Tener iniciativa, moverse rápido, evolucionar y adaptarse al entorno de forma continua, son los valores que priman en los mercados profesionales del siglo que nace.
Lo que pomposamente ha sido denominado por organizaciones como la UNESCO “competencias del siglo XXI”, son una serie de habilidades, más que conocimientos, que se consideran fundamentales para vivir y trabajar en esta nueva era. Aspectos como la creatividad, la innovación, el pensamiento crítico o el dominio de los medios digitales, destacan como cruciales para el desempeño profesional de las nuevas generaciones. Y precisamente éstos son los temas en los que se centra Think Big Jóvenes.
Este programa de Fundación Telefónica, actualmente en su segunda edición, apoya iniciativas de jóvenes españoles de entre 15 y 25 años que tengan como finalidad ayudar a los demás o mejorar el entorno. A pesar de que los candidatos reciben una pequeña cantidad de dinero para poder iniciar su proyecto, el apoyo fundamental consiste en formación, tanto online como presencial, y en orientación a través de un mentor. Cada joven participante en la iniciativa tiene asignado a un voluntario de Telefónica que le ayudará a resolver los problemas operativos que puedan surgir en la puesta en marcha del proyecto.
En esta edición de 2013 de Think Big Jóvenes se han seleccionado 300 propuestas. Como es lógico dada la inmersión digital de la juventud actual, un gran número de las ideas presentadas están relacionadas en mayor o menor medida con la tecnología y precisamente queremos dedicar este post a presentar algunas de ellas para poner en evidencia, a través de unos pocos ejemplos, el grado de creatividad de los jóvenes de España.
Tecnología y mundo digital al servicio de la sociedad
Desde Guadalajara nos llega una propuesta para crear un archivo digital de entrevistas a personas mayores que residen o se criaron en la zona del Alto Tajo, como una forma de preservar unas costumbres y conocimientos que se pierden a pasos agigantados. Se trata de recopilar información sobre topónimos, tradiciones, recetas, viejos oficios e incluso la biodiversidad agrícola local, en peligro por el abandono del cultivo de determinadas variedades agrícolas, poniéndola a disposición de todos a través de canales como YouTube o Vimeo.
También relacionado con la preservación de la memoria colectiva, Calles que hablan plantea el desarrollo de un itinerario sonoro geolocalizado de Ciutadella de Menorca de manera que cualquier persona pueda caminar por las calles del barrio escuchando a través de su smarthone los recuerdos de sus habitantes en el mismo sitio donde ocurrieron.
Por su parte, un joven gallego ha presentado al programa la creación de la app Cityon destinada a ofrecer todo tipo de información online de utilidad para sus habitantes sobre la ciudad de Ferrol. Los usuarios podrán interactuar con el servicio a través de sus perfiles en redes sociales.
Y desde Madrid llega otra propuesta de app para smartphone para contribuir a garantizar la seguridad de los turistas en las ciudades. SafeTour informa sobre los timos y delitos más frecuentes, acerca de las zonas más peligrosas, y permite al usuario geolocalizarse para encontrar señalizadas las comisarías, hospitales, farmacias, embajadas, y cualquier servicio de este tipo que pueda necesitar.
El intercambio de favores a través del trueque es la base de Beshop, una red social en la que cada miembro ofrece sus habilidades y conocimientos a cambio de los de otros. Cualquier servicio tiene su valor en la red, desde realizar una traducción hasta solucionar un problema informático o aportar una pieza de diseño gráfico. Lo importante es tener algo que ofrecer a los demás.
La creación de redes sociales es una constante en muchos de los proyectos de estos jóvenes criados en la era de Tuenti y Facebook, como es el caso de BIIDEA, definida por su autor como una comunidad online de emprendimiento en la que jóvenes emprendedores puedan encontrar asesoría, socios inversores y servicios para arrancar su negocio.
Cinco estudiantes de ingeniería industrial alicantinos han presentado a Think Big Jóvenes Comunapp, una aplicación móvil en la que los usuarios pueden compartir apuntes, exámenes, ejercicios resueltos, trabajos e información de sus asignaturas, clasificados por universidades, titulaciones y asignaturas desde sus smartphones.
Social Cooking consiste en la creación de un portal de Internet que permita poner en contacto a dos grupos sociales con necesidades complementarias, como son personas mayores con tiempo libre y el colectivo de los solteros/as. Las personas mayores de Benalmádena que estén dispuestas a ello pueden preparar un menú diario para dos o tres personas a un precio económico para personas solteras sin tiempo para cocinar.
Finalmente, The SocialJob es la propuesta de un joven murciano para crear una red social donde los parados puedan comunicarse en función del sector en el que se muevan, dando ideas, proponiendo proyectos, aconsejando masters, cursos, empresas donde intentar trabajar, guías para conseguir ayudas y subvenciones del estado e incluso guías para encontrar trabajo en el extranjero.
Una pequeña muestra, en definitiva, del talento que encierra la juventud de nuestro país.