Un equipo de investigadores inventa un sistema de impresión 3D destinado a crear estructuras que ayuden a recuperar las barreras de coral.
Entre 2016 y 2017, las olas de calor y el aumento de las temperaturas en el agua provocó una catástrofe sostenida en la Gran Barrera de Coral. Se estima que más de un 30% de ésta se vio dañada por estas causas.
No son pocos los proyectos que se han puesto en marcha para tratar de recuperar esta maravilla marina. Desde la repoblación mediante robots a una vigilancia más estrecha de este patrimonio natural, también mediante medios autónomos, como son drones. De esta forma se detectan antes los peligros y pueden limitarse los perjuicios.
Pero no todos los métodos para salvar los corales pasan por la automatización. Un equipo de científicos de varias universidades israelíes ha trabajado en un método que podría calificarse como más tradicional. Aunque no está exenta de sofisticación. Esta se encuentra en la impresión 3D. Se emplea esta técnica para fabricar estructuras complejas, que después son emplazadas en la zona de corales.
Los científicos han probado su método en la costa de Eilat, ciudad meridional de Israel, que linda con el golfo de Áqaba, uno de los dos dedos que el mar Rojo tiende hacia el norte. El otro es el golfo de Suez, y entre ambos sostienen la península del Sinaí. Este es el paraje donde los investigadores se han decidido a actuar. Una zona popular entre los turistas por ofrecer el submarinismo como uno de sus atractivos.
Sin embargo, aquí los corales tampoco escapan al deterioro. De ahí que estos investigadores hayan buscado crear estructuras allá donde ven que estas no se pueden regenerar de forma natural.
Imitar la naturaleza para recuperarla
El objetivo de recuperar las barreras de coral no es sencillo. Pero la impresión 3D facilita la producción de estructuras complejas, que pueden ser empleadas como viveros de peces. Y es que, la presencia de peces es uno de los factores que más influyen en la recuperación de los corales.
Es algo recíproco, porque la complejidad estructural de los corales está ligada a una mayor biodiversidad. En este sentido, la impresión 3D tiene la capacidad de generar este tipo de estructuras enrevesadas. Se trata de imitar lo que la naturaleza ha pulido durante un largo periodo de tiempo. Ni es fácil ni se hace rápidamente. Pero en ello está el equipo de investigadores.
De momento han logrado diseñar diferentes formas, con combinaciones de colores y materiales. Todo para imitar a los corales que pueblan el fondo marino de la zona. Las estructuras están formadas por bioplásticos, hechos de maíz y caña de azúcar, y son biodegradables.
La idea es pasar de la costa de Eilat a otras zonas, como la Gran Barrera de Coral, donde sin duda hay mucho trabajo que hacer.
Imágenes: keppet, verchmarco
