El 9 de junio de 2023 quedará, posiblemente, marcado para la historia de la Iglesia luterana y de Alemania. Justo, ese día, se llevó a cabo la primera misa realizada con inteligencia artificial.
Sí, leíste bien. Esta realidad llegó también a las iglesias. Por eso, en este artículo queremos contarte cómo se dio y qué impresiones tuvieron los asistentes. Además, cómo se relaciona este acontecimiento con la monja estadounidense Mary Kenneth Keller.
Primera misa oficiada con inteligencia artificial
Sin duda, asistir a esta eucaristía se asemejó a lo que se vive en un cine, pues solo se observó la pantalla. La diferencia es que se dio en una iglesia.
¿Cómo sucedió esto? Pues bien, cada dos años se celebra en Alemania la Deutscher Evangelischer Kirchentag. Este encuentro tiene como objetivo hablar sobre la actualidad mundial y buscar soluciones a diversas situaciones. Las de este año fueron el calentamiento global, la guerra en Ucrania y la inteligencia artificial.
Así, Jonas Simmerlein, teólogo y filósofo de la Universidad de Viena, se encargó de concebir esta idea. Para eso, le dijo a ChatGPT: “Estamos en el congreso de la iglesia, eres un predicador… ¿cómo sería un servicio de la iglesia?”. Además, le dio el slogan “Ahora es el momento” y que incluyera salmos, oraciones y una bendición al final.
Si bien Simmerlein acompañó la misa, el 98% fue hecha con ChatGPT. El servició duró 40 minutos y estuvo a cargo de cuatro avatares: dos hombres y dos mujeres. Uno de ellos comenzó diciendo: “Queridos amigos, es un honor para mí estar aquí y predicarles como la primera inteligencia artificial en la convención de protestantes de este año en Alemania”.
Unos miraron asombrados; y, otros, disgustados. Lo cierto es que la cola para entrar a la iglesia fue larga. En el sermón se trató de dejar atrás el pasado; enfocarse en los desafíos del presente, vencer el miedo a la muerte y nunca perder la confianza en Jesucristo.
La predicción de Mary Kenneth Keller
Se trata de una religiosa que hizo una predicción muy interesante. En su época, se destacó por ser pionera en la informática. Tanto así, que fue la primera mujer en obtener un doctorado en informática en Estados Unidos.
Gracias a sus conocimientos, fue capaz de predecir el uso que le daríamos a la inteligencia artificial; así lo demuestra un artículo de Denise Gürer. En este, la catedrática y científica muestra varios de los pensamientos de la hermana Keller.
En uno de ellos afirma que “estamos viviendo una explosión de información, entre otras cosas, y es evidente que la información no sirve de nada si no está disponible». Lo anterior deja entrever que la hermana creía que tecnologías como la IA podrían ser determinantes en la educación.
Además, también expresó que el ordenador podía asistir a los humanos en el aprendizaje. “Dado que con el paso del tiempo vamos a tener un mayor número de estudiantes maduros, este tipo de enseñanza será, probablemente, cada vez más importante”.
Pero ¿qué pensaron los asistentes?
Algunas opiniones de los asistentes a la misa
Al inicio de la misa todos los asistentes tenían muchas expectativas. De hecho, algunos grabaron con sus móviles. Uno de los detalles que más sorprendió fue cuando el chatbot pidió que se levantaran y adoraran a Dios.
Por un lado, Heiderose Schmidt, una mujer de 54 años, dijo que sintió emoción al inicio de la misa. No obstante, a medida que avanzaba, no pudo contener su descontento. “No había corazón, ni alma”. “Los avatares no mostraban emociones en absoluto, no tenían lenguaje corporal y hablaban tan rápido y, monótonamente, que me resultaba muy difícil concentrarme en lo que decían”.
Por su parte, Anna Puzio, de 28 años, dijo que “no tenemos una sola opinión cristiana, y eso es lo que la inteligencia artificial también tiene que representar. Debemos tener cuidado de que no se use, indebidamente, para difundir una sola opinión”.
En ese sentido, esta misa en Alemania dejó claro que la IA puede ayudar a orientar el discurso. Esto permitiría dedicarles más tiempo a otras actividades importantes de la Iglesia. Así también, que nada podrá reemplazar la cercanía que el pastor tiene con su comunidad porque nadie la conoce como él. Además, se evidenció que los avatares no responden a risas del auditorio. Es decir, la interacción es nula. Por eso, si bien la tecnología puede llegar a diversos escenarios, es importante que el ser humano esté frente a ella. Solo así cobrará verdadero sentido.
