Muchas veces se utiliza el progreso como bandera de innovación, pero alguna de ellas también como escaparate vacío con el fin de agradar en el mundo.
El progreso en el mundo actual suele venir dado por una fuerte inversión en tecnología por parte de grandes empresas y corporaciones. O en ciertos casos, por financiación estatal gracias al I+D.
La ciencia y la innovación suelen constituir un elemento muy importante también para la imagen que cada país da al mundo. Por ejemplo, a todos al oír hablar de lugares como Japón, Corea del Sur o Singapur se nos vienen a la cabeza ideas de sitios futuristas, más cercanos a los que vemos en el cine que a los que percibimos en nuestra propia realidad.
Tecnología inservible
Pero muchas veces, este progreso está «cogido con pinzas», y se usa para que esta imagen que se da al exterior sea solo eso, imagen. «Progresos» de este tipo hay muchos, por ejemplo el caso de China y los robots. En muchos establecimientos del país oriental, el uso de androides, un poco al libre albedrío, ha propiciado que se llegue a situaciones como la ocurrida en un restaurante de Shanghai. Allí existen los camareros robots pese a que no tienen ninguna utilidad, porque son los camareros reales los que tienen que poner en la mesa los platos que son sujetados por los propios robots, puesto que ellos solo sirven de bandeja. O también es el caso del E-Patrol Robotic Sheriff, un robot policía que se creó para vigilar la estación de Shenzen, y que acabó siendo una atracción más para turistas y viajeros, pero tuvo que ser retirado al no cumplir sus objetivos por no percatarse de un incendio en la propia estación, lo cual era una de sus labores principales.
La tecnología se utiliza muchas veces como escaparate frente al resto de países y suele tener un efecto bastante positivo en la percepción externa de ciertos lugares. El caso de China no es un hecho aislado, y nos sirve para comprender cómo muchas veces, bajo la bandera del progreso, se emplean determinados efectos tecnológicos para ensalzar una imagen que la mayoría de las veces no hace falta ni ensalzar, porque en el caso de China, por ejemplo, se encuentra a la vanguardia dentro de este ámbito.
