En la revolución tecnológica, tecnología y accesibilidad deben ir de la mano para lograr una sociedad más justa para las personas con discapacidad.
A lo largo de la historia los avances tecnológicos han impulsado grandes cambios sociales. Las sociedades actuales se caracterizan por un fuerte compromiso ético y social, por lo que es el momento ideal para que las personas con discapacidad puedan vivir en situación de igualdad real con el resto de los ciudadanos.
Para lograrlo, se deben dar dos condiciones. Por una parte, es imprescindible comprender el papel que juega la tecnología para impulsar la accesibilidad. Y, por otra parte, entender la importancia que tiene la accesibilidad para asegurar que la tecnología pueda ser utilizada por todas las personas con independencia de sus capacidades, habilidades o conocimientos.
La tecnología como vehículo para construir un entorno accesible
La aplicación de la tecnología en las actividades cotidianas mejora la calidad de vida de las personas con discapacidad, impulsando su autonomía.
Si analizamos un día de compras podemos darnos cuenta del impacto de la tecnología en la accesibilidad.
Preparación para ir de compras
Si queremos hacer una compra planificada, solemos hacer una lista de la compra, pero para las personas con poca o nula destreza manual o baja visión puede resultar imposible escribir o teclear. Sin embargo, con asistentes virtuales como Siri o Alexa, los usuarios pueden planificar su compra con unos simples comandos de voz.
Llegada al supermercado
Durante el recorrido por la ciudad, también existen avances tecnológicos que favorecen la accesibilidad del entorno.
Las sillas de ruedas manuales cada día son más ligeras, y las sillas de ruedas eléctricas tienen más autonomía. También existen rampas para acceder al transporte público y aplicaciones que muestran dónde hay estacionamientos para personas con movilidad reducida. Todas estas tecnologías garantizan la accesibilidad para las personas con discapacidad física.
Además, otro tipo de apoyos, como las aplicaciones de navegación por GPS, ayudan a que las personas con discapacidad visual puedan orientarse conservando su autonomía.
En el supermercado
Al ir de compras, la variedad de productos con envases parecidos, la tarea de cargar cosas pesadas o realizar cálculos para pagar pueden ser barreras importantes para algunas personas con discapacidad.
Por suerte, hoy en día existen aplicaciones que permiten utilizar la cámara del smartphone para describir o ampliar el objeto que enfocan, ayudando a percibir la información relevante.
Hacer las compras se vuelve más sencillo con carritos adaptados que se conectan a las sillas de ruedas. Además, mejoras simples como cestas con ruedas o innovaciones más avanzadas, como elevadores que ayudan a sacar la compra de la cesta para ponerla en la cinta de la caja al pagar, reducen el esfuerzo tanto para personas con discapacidad como para aquellas sin discapacidad.
Y, el proceso de pagar la compra es más fácil para las personas con discapacidad física, visual y cognitiva, gracias a las tecnologías de pago con smartphone, al eliminar la necesidad de manipular dinero físico y realizar cálculos en poco tiempo.
Otras alternativas de compra
Por último, si existe la posibilidad de hacer las compras a través de una página web o una plataforma digital accesible, el impacto de la tecnología en la calidad de vida de las personas con discapacidad se acrecienta.
Se ofrece la oportunidad a personas con discapacidades muy severas, sin apenas movilidad y con limitaciones en el habla, de realizar la tarea de manera autónoma, utilizando sistemas de seguimiento de la mirada que les permiten navegar por internet, comunicarse y tomar decisiones.
Cómo desarrollar tecnología accesible
Ningún avance tecnológico es útil para las personas con discapacidad por sí mismo. La tecnología solo impulsa la accesibilidad si es accesible. Es importante que los productos y servicios estén diseñados teniendo en cuenta las necesidades de las personas con discapacidad y reúnan ciertas características básicas como:
- Proporcionar la información de diferentes formas: Es decir, si se presenta una información en formato texto, se debe ofrecer una alternativa sonora o táctil, y viceversa. Así, se garantiza que tanto las personas con discapacidad auditiva como las personas con discapacidad visual comprendan la información.
- Evitar los mecanismos complejos que exijan destreza y precisión: De esta manera resultará fácil de usar para las personas con temblores o problemas de motricidad fina.
- No transmitir información solo por el color: Esto permitirá que las personas con dificultades para diferenciar los colores puedan disfrutar de la experiencia completa, pero también que los cambios de iluminación no influyan en el uso de un producto.
- Ofrecer instrucciones claras y simples: Las indicaciones paso a paso, con el apoyo de iconos y ejemplos, ayuda a las personas con discapacidad cognitiva a utilizar las nuevas tecnologías.
La tecnología accesible clave para el cambio social
A lo largo del artículo, hemos reflexionado sobre cómo la tecnología juega un papel muy importante en la autonomía de las personas con discapacidad, siempre y cuando reúna una serie de características fundamentales.
Sin embargo, el impacto de la tecnología accesible en la sociedad va mucho más allá de poder realizar tareas básicas de forma independiente. La tecnología que tiene en cuenta las necesidades de las personas con discapacidad permite que puedan expresar sus preocupaciones, deseos y necesidades.
Los avances en tecnología accesible visibilizan y dan voz a las personas con discapacidad. Además, también ayudan a reducir, la brecha digital a la que se enfrentan las personas mayores y facilitan la integración social de las personas que no conocen el idioma y simplifican las tareas a todas las personas. En resumen, la tecnología accesible nos beneficia a todos.
Imagen de cabecera: Unsplash
