Hasta los grandes directores del séptimo arte cometen fallos, algunos de ellos muy graves.
El cine es considerado como el séptimo arte y tiene motivos para merecer este título. Muchas películas han pasado a la historia por lo que cuentan sus personajes, por sus tramas o por sus nuevas técnicas en cuanto a la producción y postproducción, creando así obras maestras.
Pero en todas las películas siempre hay un gazapo. Para quien no sepa lo que es, está considerado por los cinéfilos como un error que aparece en escena o cuando se producen incongruencias en el guion de una película.
Los amantes del cine siempre están en alerta para detectar algún gazapo. Ni siquiera los grandes directores se libran de haber cometido equivocaciones en sus películas, aunque pasen desapercibidos para muchos. La realidad es que siempre salen al descubierto.
¿Por qué se producen estos gazapos?
La filmación de un largometraje es un proceso muy largo y a la vez minucioso. Cada escena se graba muchas veces, después se eligen los mejores planos y, en ocasiones, se graban en distintos días.
Por esta razón, pueden surgir los famosos gazapos. Como hemos dicho anteriormente, ninguna película se libra de tener alguna que otra equivocación insignificante, pero existen casos en los que el error es muy notorio y puede producir momentos de risa o de decepción en el espectador.
A continuación, os mencionamos algunos de los errores más conocidos en los últimos años.
Gladiator: cinco Oscars y varios errores futuristas
La película dirigida por Ridley Scott y protagonizada por Russell Crowe nos lleva a la época de la Antigua Roma, donde el general romano Máximo busca venganza tras perder a su familia.
Gladiator se convirtió en la película con más premios Oscar en el año 2001, ganando las categorías de mejor película, actor principal, diseño de vestuario, sonido y de efectos especiales.
Aunque el metraje ha tenido erratas para enmarcar, como es el caso de que aparezcan cámaras en los planos o botellas de agua en la grada del Colisseo. Pero el gazapo más conocido por todos los espectadores, sin duda, es la bombona que aparece debajo de una de las cuadrigas, sin olvidar las botas modernas que aparecen también en otra cuadriga.
Al parecer, las nuevas tecnologías llegaron también al siglo I d.C.
Braveheart y los innumerables errores
Viajamos unos siglos y nos adentramos en la Escocia del siglo XIII. Braveheart está dirigido y protagonizado por Mel Gibson y cuenta la historia de cómo los escoceses lucharon contra el yugo de los ingleses.
Fue alabada por la crítica en 1995 y recibió cinco estatuillas en la categoría de mejor director, película, efectos sonoros, fotografía y maquillaje.
Cuenta con secuencias impresionantes, pero también con errores garrafales. Algunos de ellos se refieren al uso de armas que se doblaban como si fueran de goma o banderas y símbolos que no existían en la época que narra la película.
Pero el mayor gazapo reconocido por los cinéfilos fue la aparición de un coche, que se podía ver en el fondo de una escena de batalla.
Con razón los escoceses tenían ventaja sobre los ingleses… ¡Viajaban en coches en el siglo XIII!
Regreso al futuro III: compañerismo, ante todo
La trilogía de Regreso al futuro fue dirigida por Robert Zemeckis y protagonizada por Christopher Lloyd y Michael J. Fox.
Es considerada como una de las sagas más exitosas en la historia del cine. Tanto es así que se han hecho series que hacen un guiño a esta trilogía.
¿Quién no recuerda el mítico DeLorean superando los 140 kilómetros por hora para poner en funcionamiento el condensador de fluzo?
Para empezar, ya tenemos un desacierto: en realidad, el nombre original al componente principal que da vida a la máquina del tiempo no es condensador de fluzo. Se tradujo mal al doblaje en español, y el verdadero nombre sería condensador de flujo.
Pero también se cometieron fallos en el rodaje. Uno de ellos muy pequeño e inocente, ya que viene de la mano de un niño. Nos situamos en la última entrega de la saga, Regreso al futuro III, en la escena final, donde se puede apreciar que uno de los hijos del científico Emmet Brown hace un gesto hacia la cámara que indica que tiene que hacer un travelling hacia ellos.
¿Qué puede hacer la tecnología para solucionar esto?
El mundo del cine cuenta ahora con herramientas especializadas para la posproducción de una película. Hace décadas, las labores de un editor de vídeo eran muy difíciles para detectar y eliminar los numerosos gazapos que pueden aparecer en escena. Pero hoy es posible grabar y montar con software que nos simplifica mucho estas tareas.
Aplicaciones como DaVinci Resolve o Shotcut son programas especializados en edición que están al alcance de todos los usuarios y permiten la corrección de todas las imperfecciones que pueden aparecer en la imagen.
¿Te atreves a encontrarlos?
En Movistar+ y en Netflix encontrarás un amplio catálogo, y entre ellas están las películas mencionadas en este artículo.
¿Serás capaz de identificar algún gazapo que aún no se haya descubierto?