La tecnología de los motores Tesla aplicada a los sistemas de energía solar puede ayudar a compensar los picos de demanda de las empresas, reduciendo notablemente el coste de la factura eléctrica
La tecnología de los motores de Tesla ha captado la atención de empresas como SolarCity que han visto en este sistema una vía interesante para la reducción de los costes de electricidad en los edificios con fuentes de energía renovable mediante paneles solares. La combinación de los motores Tesla con energía solar llevada a cabo por SolarCity puede ser la solución a los problemas de la intermitencia de la energía solar y los picos de demanda de la red general en horas punta.
Los investigadores de SolarCity han estudiado la compatibilidad del uso de baterías de almacenamiento de energía con la intermitencia de energía solar fotovoltaica para reducir la cantidad de energía que obtienen de la red y ayudar a las empresas a reducir el coste de las facturas. Elon Musk, presidente de SolarCity, se ha decantado por Tesla Motors para el suministro de las baterías, donde curiosamente Musk es también director ejecutivo.
Según señalan los expertos, la intermitencia de la energía solar no es un gran problema para las compañías eléctricas, ya que la energía solar aportada a la red sólo representa una pequeña fracción del total del suministro. Sin embargo, coinciden en señalar que a la larga puede convertirse en una carga importante para la red a medida que la producción de energía solar crezca. Por ejemplo, los picos de subida y bajada de los paneles fotovoltaicos, como el paso de nubes de apenas unos segundos, generan ciertos problemas funcionales en las herramientas que utilizan las compañías eléctricas para ajustar la oferta y la demanda del suministro.
Por otro lado, la facturación periódica de las compañías eléctricas a las empresas se basa en la medida del consumo total de electricidad en kilovatios/hora hasta el periodo de lectura, y además tienen en cuenta lo que ellos denominan el pico de demanda, que puede rondar entre el 20% y el 60% del total de la factura. Estos picos de demanda pueden ser importantes en el caso de empresas con equipos industriales que requieren el uso de transformadores considerables y equipos de cierta potencia, lo que influye notablemente en la factura de electricidad.
Con previsión a resolver este problema y mejorar la eficiencia actual de los paneles fotovoltaicos se baraja el uso de baterías como solución a estos inconvenientes, tanto para las compañías como para las empresas. Pero el considerable coste de las baterías hace inviable esta solución. No obstante, el director general de SolarCity, Lyndon Rive, está convencido de que su empresa puede ayudar a reducir estos costes implementando la tecnología de los motores de Tesla y perfilando un nuevo modelo de negocio para la energía solar.
Tras cerca de cuatros años de investigación y las pruebas realizadas durante este último año, se ha conseguido implementar la tecnología que Tesla utiliza en sus coches eléctricos a las nuevas baterías desarrolladas por SolarCity. El software que las controla integra un algoritmo capaz de predecir cuándo cargar y descargar las baterías, en función de las previsiones de energía disponible en los momentos de mayor demanda. Lo que las diferencia de los motores eléctricos actuales de Tesla es el tamaño de los paquetes internos, que podrían ser algo mayores en función del tamaño del sistema de paneles fotovoltaicos al que dan servicio.
El uso de baterías como las de Tesla, junto con el software que las controla, podría reducir la dependencia de la red durante esos picos de demanda. En estos casos el funcionamiento sería bastante simple. Los paneles solares cargarían de forma continua las baterías del sistema, complementándolas con energía de la red general en el momento en que una empresa incrementase su demanda de energía por encima de la media. En el caso de los propietarios particulares y edificios residenciales, que no pagan cargos por picos de demanda, el uso de estas baterías tiene la ventaja de poder proporcionar energía en caso de fallo eléctrico de la red general o conectar dispositivos de uso esporádico a esta red interna.
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