Startups de música de Wayra

A todo ritmo: las startups musicales de Wayra

El panorama musical, la forma en la que consumimos cultura y la creación de contenidos son realidades que están cambiando a pasos agigantados en la era de Internet. Y las startups de Wayra lo tienen muy claro. Estas que os presentamos a continuación son cinco de las ideas que pueden sentar las bases del futuro de la música. Desde ver conciertos online hasta crear canciones con personas de todo el mundo, pasando por acercarnos un poquito más a nuestros ídolos, todo es posible gracias al talento y la innovación.

Yimup

Yimup es una plataforma cloud para músicos. Gracias a ella, los artistas montar su propio negocio online alrededor de su obra, siendo ellos mismos los gestores de la comercialización de sus productos o de la interacción con sus fans. El control sobre su música es total.

Han escrito un  manifiesto Yumip en el que aseguran que el monopolio sobre el contenido y los canales por los que este se distribuye ya no pertenecen a unas pocas empresas, así como los intermediarios entre artistas y seguidores ya no son necesarios. Todo esto es posible gracias a las herramientas digitales, a Internet. El control de la música ha pasado a manos de los autores, que pueden ejercerlo de manera independiente, como ellos quieran.

Aunque nace en Colombia, su vocación es internacional y bandas de otros países de América Latina o España también se han unido a la plataforma.

Event Radar

Event Radar es una red social para la promoción de eventos. Tiene una doble vertiente. Por un lado, sirve a los asistentes para conocerse y compartir experiencias. Por otro, los promotores de los espectáculos pueden darlos a conocer en ella y utilizarla como una herramienta de análisis de social media.

Para esta segunda opción, primero se configura el modo en el que quieren estudiar su show. Se definen las palabras clave o el periodo de tiempo el que va a desarrollarse, y luego se realiza una monitorización en tiempo real. Todos los datos recabados a lo largo del tiempo se almacenan para ser estudiados una vez haya acabado.

Sezion

Los creadores de Sezion tienen muy claro que, con amigos, todo es más divertido. Su aplicación aprovecha la parte más social de los creadores en Internet. El funcionamiento es sencillo. Un músico realiza una grabación (de un instrumento o de su propia voz) y la sube a Sezion. Desde allí, la comparte con otros usuarios para que añadan sus propias creaciones al primer audio, uniendo talentos y creando una obra totalmente diferente a la inicial.

Cualquiera puede proponer una base para empezar a colaborar o puede buscar las grabaciones de otros para aportar su granito de arena. Lo importante es que la suma de muchos da como resultado algo más interesante que las aportaciones aisladas. Además, también se puede compartir en Facebook y Twitter, mostrando a todo el mundo de lo que se es capaz.

Emesound

La forma en la que consumimos música está cambiando y hay toda una nueva gama de posibilidades a nuestro alcance abriendo el abanico que teníamos antes de la llegada de Internet a nuestras vidas. En Emesound lo saben bien y han puesto en marcha una plataforma y aplicación de conciertos online. Los usuarios pueden vivir la música en directo de forma totalmente diferente, desde casa y en el momento que quieran, y los artistas pueden hacer llegar sus actuaciones a mucha más gente de lo que antes era posible.

¿Renunciar a ver a nuestro artista favorito porque nos hemos quedado sin entradas en el último momento? ¿No poder llegar hasta aquellos seguidores que viven en otro continente? Nunca más. Internet extiende puentes, también musicales.

BuddyBounce

Y si la forma de consumir música ha cambiado, también lo ha hecho la manera en la que se relacionan fans y artistas. Las redes sociales han acercado al público a cantantes y músicos que, hace solo unos pocos años, eran inalcanzables.

La startup BuddyBounce

BuddyBounce quiere seguir por esa línea. Propone una plataforma en la que los seguidores pueden demostrar a sus ídolos lo importantes que son para ellos. Según sus creadoras, las relaciones entre unos y otros están basadas en la suerte, pero con su sistema pasaría a estar dominada por el esfuerzo. Los fans pueden ganar puntos comprando camisetas, yendo a conciertos o promocionando a los artistas en las redes sociales. ¿El premio? Que los artistas conozcan a esos “fans número uno” y puedan recompensarlos en persona.

Este es solo el comienzo de un cambio que llegará mucho más lejos. ¿Cómo viviremos la música en el futuro?

Imagen | Fotopedia.

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