Network Slicing es la tecnología que permite dividir una red física en diferentes subredes virtuales dedicadas, en específico, a un grupo de usuarios o a un servicio concreto. El ejemplo más gráfico sería comparar una red 5G a una autopista, en la que cada carril sería un “slice” o rebanada con capacidad y requisitos diferentes.
La importancia del Network Slicing en el 5G
Cuando hablamos de 5G se nos vienen muchos ejemplos a la mente, desde el soporte a dispositivos IoT a conectividad móvil, interconectividad entre coches conectados o robots industriales. Todas estas aplicaciones tienen requisitos muy diferentes y en algunos casos van a correr de forma simultanea sobre la misma red.
Por esto, las redes 5G deben estar basadas en un entorno Cloud que les dote de una flexibilidad, escalabilidad únicas y de la capacidad de adaptarse a los distintos requisitos de comunicación en tiempo real. Aquí entra en juego el Network Slicing.
Al dividir nuestra red 5G en subredes virtuales, y aprovechando además nuestra capacidad de ofrecer tiempos de respuesta inmediatos gracias al Edge Computing, se abre un mundo de posibilidades para la red de Telefónica y sus clientes.
¿Qué posibilidades abre el Network Slicing de la red 5G?
La posibilidad de crear una subred virtualizada con capacidades específicas para un servicio concreto abre la posibilidad de dar soporte a dispositivos y necesidades muy diversas, no sólo a nivel usuario sino profesional o industria.
¿Necesitas una red securizada para un sistema de vigilancia robótica sobre edge computing? Telefónica lo hace posible.
¿Pero la virtualización de red no era ya algo común?
Hace tiempo que la virtualización de red es posible, ejemplos como la VLAN de voz de la fibra de Movistar están en funcionamiento hace años. Sin embargo, lo que antes hubiese significado un desarrollo específico y complejo, gracias al la técnica del Network Slicing podrá desplegarse de manera dinámica y flexible, algo impensable hasta el momento.