El debut de Arm en el Nasdaq ha sido una de las salidas a bolsa más esperadas del año. Su Oferta Pública Inicial o de Venta (IPO, por sus siglas en inglés, OPV en español) ha levantado expectación y seguro que más de una reunión en los despachos de las grandes tecnológicas de la actualidad. ¿Por qué? Bien, es complicado explicar cómo siendo relativamente pequeña Arm tiene un peso tan crucial.
Vamos a intentarlo.
Seguramente alguna vez hayas jugado a la jenga. Ese juego que consiste en apilar un montón de rectángulos de madera en un orden preciso, formando una torre, y donde los jugadores deben ir sacando piezas sin que la estructura se desmorone. Bien, pues en el entramado enorme del mercado de los chips, Arm es esa pieza clave que todos quieren poseer pero que nadie quiere tocar mucho por si podría ser peor que otra cosa.
Hasta su salida a bolsa a mediados de septiembre Arm era una empresa privada de origen británico pero propiedad del gigante japonés Softbank. NVIDIA la había intentado comprar a toda costa, y Apple, Google y casi cualquier tecnológica la mimaba por los enormes intereses que hay sobre ellas.
Arm, clave en el mundo chipero
Y es que Arm es la propietaria de la arquitectura chipera que impera en una gran cantidad de dispositivos, empezando por los Mac o los iPhone. Para entender su peso hay que conocer la telaraña de empresas del mercado de los chips y cómo funciona: un juego de patentes, diseñadores, marcas y montadores donde todos dependen los unos y los otros y de que funcionen como un reloj. De hecho, los retrasos de algunos durante la pandemia provocó la crisis del mercado a nivel mundial que aún se siente.
Es por esto que su salida a bolsa se ha visto como un antes y un después. Softbank sigue manteniendo el 90% de sus acciones, pero ha abierto la puerta a que cualquiera la compre y según fuentes de Bloomberg, todas las grandes marcas que te imaginas están poniendo dinero para lograr un puesto en un futuro consejo de dirección.
No es de momento las acciones se hayan disparado. La empresa empezó a cotizar con 95,5 millones de acciones a 56 dólares por papel —un 10% por encima de su precio inicial de oferta— y cerró a 63,59 dólares. Ahora, se mantiene en esos números. Pero todo parece un tira y afloja a cámara lenta en el que hay que tener en cuenta que cualquier gran compra de acciones por otra gran empresa debería pasar por los reguladores.
Pero, empecemos por el principio.
Quién es ARM en el influyente mercado de los chips controlado por Softbank
Arm como decíamos es en origen una compañía británica, ha desempeñado un papel fundamental en la industria de los chips y procesadores desde su fundación en 1990.
Su arquitectura de procesadores, conocida también como ARM (Advanced RISC Machine), es ampliamente utilizada en una variedad de dispositivos, incluyendo teléfonos inteligentes, tabletas, computadoras portátiles y dispositivos IoT. La arquitectura Arm se ha convertido en un estándar en la industria, gracias a su eficiencia energética y rendimiento.
En 2016, SoftBank pagó 32.000 millones de dólares (29.421 millones de euros) para hacerse con Arm. El conglomerado japonés comenzó a preparar la salida a bolsa de la firma británica después de que las presiones de los reguladores frustrasen la venta de la compañía a NVIDIA, que acordó en 2020 por 40.000 millones de dólares (36.776 millones de euros).
Antes de la adquisición por parte de Softbank en 2016, ARM era una compañía independiente. Durante este tiempo, estableció una sólida reputación y se convirtió en un socio clave para muchas empresas tecnológicas, incluyendo a Apple.
NVIDIA, el tiburón que no pudo tragarse a ARM
El interés de NVIDIA en Arm no es nuevo. En 2020, NVIDIA anunció planes para adquirir a la empresa en una operación que habría sido una de las más grandes de la industria tecnológica. Sin embargo, la adquisición se encontró con obstáculos regulatorios y finalmente fue bloqueada. A pesar de esto, NVIDIA ha demostrado un gran interés en controlar Arm debido a la importancia estratégica de su arquitectura en la industria de los chips.
NVIDIA es conocida por sus potentes tarjetas gráficas y su experiencia en inteligencia artificial. Al adquirir Arm, NVIDIA habría fortalecido su presencia en el mercado de los chips y habría tenido acceso a una amplia base de clientes que utilizan su arquitectura. Sin embargo, el bloqueo de la adquisición ha llevado a NVIDIA a explorar otras opciones estratégicas para asegurar su posición en el mercado.
Apple se encargó de blindar su relación con ellos, pero ahora podría ir a más
Apple es la empresa más importantes que confía en Arm para el diseño de sus chips. La relación entre Apple y Arm se remonta más de 3 años ya, y ha sido fundamental para el éxito de los dispositivos de la compañía de la manzana en los últimos años, donde desde la presentación de su M1, en 2020, la firma de Cupertino ha recuperado enteros en solvencia y rendimiento de sus máquinas tras unos últimos años no tan brillantes con Intel.
Su arquitectura es la base de los procesadores Apple Silicon, que han sido ampliamente elogiados por su rendimiento y eficiencia energética.
La confianza de Apple en Arm es tan fuerte que ha firmado un contrato a largo plazo para utilizar la arquitectura ARM en sus chips. Este contrato garantiza a Apple acceso exclusivo a las tecnologías y diseños de la chipera hasta 2040. Esto demuestra la importancia estratégica de Arm para Apple y su deseo de mantener una relación a largo plazo con la compañía.
Intel y Google también tienen algo que decir
Además de NVIDIA y Apple, otras empresas importantes también han mostrado interés en la IPO de esta compañía. Intel ha estado buscando oportunidades para expandirse en el mercado de los chips móviles y la arquitectura ARM podría ser una opción atractiva. La adquisición de tal compañía le daría a Intel acceso a una amplia base de clientes y le permitiría competir de manera más efectiva con otros fabricantes de chips.
Google, por su parte, ha estado invirtiendo en la arquitectura Arm en los últimos años. La compañía ha desarrollado sus propios chips basados en las patentes de nuestra protagonista para sus dispositivos Pixel y ha expresado interés en continuar utilizando esta arquitectura en futuros productos. La IPO de ARM podría brindar a Google la oportunidad de profundizar su relación con ellos y asegurar su acceso a las tecnologías y diseños de la compañía.
Ahora todo el mundo puede comprar un trozo de ARM
Los planes que se están elaborando estos días es posible que cambien más, pero según las fuentes que citaba Bloomberg, las empresas que se espera que inviertan incluyen no solo a Apple, Nvidia, Intel y Google, sino también a AMD, Samsung, Synopsys y Cadence. Sistemas de diseño.
Se espera que cada uno de ellos invierta entre 25 y 100 millones de dólares, y todos tienen muy buenas razones para querer una parte de Arm y sentarse en la mesa a decidir qué ocurre con uno de sus grandes proveedores.