El 5G es más que una nueva generación de telefonía móvil. Hay quienes, incluso, la califican de “revolución tecnológica” por sus numerosas e increíbles posibilidades, que influirán, sobre todo, en el ocio, el Internet de las Cosas, los coches conectados y la medicina.
Las dos primeras generaciones hicieron posible el uso de los teléfonos móviles, que supuso entonces un gran salto respecto a los teléfonos fijos. La tercera, trajo Internet y los volvió “inteligentes”, los llamados smartphones. La cuarta continuó esta línea de mejora, perfeccionando la experiencia de usuario y aumentando las capacidades. Tanto que hoy podemos hacer prácticamente cualquier cosa desde el móvil.
La quinta, también llamada 5G, ya ha llegado para quedarse. Hace escasos días, el pasado 1 de septiembre, el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, anunció el encendido de su red 5G en España que a finales de este año 2020 habrá alcanzado al 75% de la población nacional.
“Para todos, sin excepciones”, recalcó el presidente, y “En todas las Comunidades Autónomas”. De este modo, la combinación de la fibra óptica y del 5G convertirá a España, en cuestión de semanas, en el país más hiperconectado de Europa, gracias a esta tecnología emergente que promete cambiar nuestro modo de vida.
¿En qué consiste exactamente? ¿Cuáles son los beneficios del 5G?
Las posibilidades de su aplicación son tan diversas como ambiciosas. A nivel de usuarios particulares y de compañías, el 5G aumentará la velocidad de Internet a una cantidad inusitada, difícil hasta de imaginar. Hablamos de milisegundos.
Por ejemplo, podremos llegar a descargar una película en solo un segundo, seguir las retransmisiones deportivas desde cualquier ángulo de la cancha, como si estuviéramos allí presentes, y jugar desde el smartphone con la misma fluidez que desde el ordenador o una videoconsola.
Todo ello es posible también gracias al Edge Computing, una de las tecnologías que definirá y supondrá una revolución en nuestra manera de conectarnos a Internet, más veloz.
El Internet de las Cosas
Sin embargo, esta velocidad no será exclusiva para el ocio, claro. Las empresas también notarán un incremento muy significativo de su conexión a la red. Incluso, verán, por fin, cómo se conectan los dispositivos electrónicos entre sí de manera notable.
Lo que llamamos Internet de las Cosas (IOT), y que lleva algún tiempo dando sus primeros pasos, experimentará un desarrollo enorme, volviendo las máquinas y electrodomésticos «inteligentes».
El coche conectado
Otro de los principales ámbitos de acción y beneficios del 5G es el de los coches conectados. Coches que cuentan con la capacidad de mejorar su conectividad gracias a Movistar Car, el dispositivo inteligente de Telefónica que ofrece grandes ventajas al permitir recordar al usuario dónde aparcó el coche; enviar de forma automática alertas si ha sufrido un avería, o recomendaciones sobre las rutas más óptimas en función del tráfico o los radares. Y todo ello sin consumir datos.
Con el 5G, no solo dispondrán de wifi, sino que se podrán llegar a conectar con el entorno que los rodea: con los semáforos, para saber cuándo se pone en rojo de repente, con otros vehículos, para no chocar, e incluso de alertar de la presencia de ciclistas y peatones cercanos.
Esto abre la puerta a los ansiados coches autónomos, capaces de dirigirse solos y que, hasta ahora, se encuentran en niveles experimentales y asistidos.
La medicina
El ámbito de la salud también se verá especialmente afectado. El 5G no solo permitirá monitorizar con extraordinaria rapidez a pacientes en riesgo, por ejemplo, con relojes o wereables, sino que brindará la posibilidad de operar a distancia.
Ya se han realizado algunas operaciones utilizando esta tecnología, como esta endoscopia digestiva desde Málaga, en la que participó un doctor japonés desde su hospital, a más de 11.000 kilómetros de distancia.
Quizá, con el tiempo, también puedan beneficiarse otras herramientas, como las ambulancias, y contar con 5G para hacer diagnósticos por imagen y teleasistencia, o los drones puedan transportar desfibriladores, en casos de necesidad.
Todo ello, que parece tan lejano e inaccesible, empieza a considerarse con la llegada del 5G. No es de extrañar, por tanto, que se hable de una auténtica revolución tecnológica que ya ha llegado de la mano de Telefónica.
Gif: Telefónica.