Llevar la computación al filo de la red. Gracias al Edge Computing es posible ofrecer servicios con necesidades de baja latencia, altas velocidades y calidad, como, por ejemplo, los de reconocimiento facial. Telefónica ha mostrado proyectos piloto en MWC19.
Somos conscientes de que la conectividad es el oxígeno del mundo digital. Por esta razón, la innovación tecnológica y la mejora de las infraestructuras, construyendo redes más rápidas, inteligentes, dinámicas y sostenibles, se convierten en elementos clave del sector de las telecomunicaciones. Al fin y al cabo, para dar el mejor servicio y conexión a la sociedad, hay que servirse de la mejor y más vanguardista tecnología.
Llevamos meses hablándote de las infinitas posibilidades que nos brindan el 5G, IoT, Open Access, Cloud, Blockchain o Inteligencia Artificial, y ahora toca hablar de Edge Computing, una tecnología con la que podemos desplegar servicios, contenido e inteligencia en milisegundos.
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¿Qué es Edge Computing? Computación al filo de la red
Para entender qué es, primero necesitamos un poco de contexto. El primer paso es pensar en la gigantesca cantidad de datos y funcionalidades que hay en el mundo digital. Navegamos en incesante flujo de información y cómputo que, con la llegada del IoT y sus innumerables sensores y objetos conectados, va a ir en aumento. Según Cisco, en 2020 habrá más de 50.000 millones de dispositivos IoT conectados. ¿Qué significa esto? Muchos más datos y, por tanto, mucha más información que gestionar, analizar y predecir… en pocas palabras, que computar.
Toda esta enorme cantidad de datos, generados en apenas segundos, resultan pasivos si no tienen conexión y, además, gestionarlos desde el cloud. Sin embargo, ¿qué pasa si todos esos datos, en vez de viajar y llegar hasta la nube, se procesan y se analizan antes? ¡Eureka! Aquí aparece el Edge Computing.
La clave del Edge Computing está en que permite que los datos se puedan procesar más cerca de donde se crearon en lugar de enviarlos a través de largos recorridos para que lleguen a data centers y nubes.
¿Qué ventajas tiene el Edge Computing?
Gracias a que con el Edge Computing los datos se procesan más cerca de donde se generan, podemos gozar de latencias muy bajas, así como de una velocidad y calidad muy altas y muy predecibles. Esto puede significar un ahorro de tiempo esencial para un montón de industrias y son beneficios de los que precisarán muchos de los servicios y aplicaciones del futuro.
Por ejemplo, el Coche Conectado, que necesita analizar información en milésimas de segundo para conseguir la conducción asistida, o aplicaciones como vídeo 8K, la realidad virtual y aumentada, los vídeo-juegos por streaming, el Internet táctil, la robótica o vehículos autónomos.
Un sistema de reconocimiento facial basado en Edge Computing que reconoce tu cara en milisegundos y cuida tu privacidad
En el marco de MWC19, Telefónica ha mostrado soluciones que permiten la posibilidad de programar y gestionar la conectividad de forma dinámica según las necesidades de cada usuario.
También otros casos de uso que muestran el potencial del almacenamiento en el borde y permiten subir documentos diez veces más rápido que al cloud actual.
Una ejemplificadora demostración, que pone de manifiesto el posicionamiento de Telefónica sobre la privacidad, ha sido una aplicación de reconocimiento facial que, mediante Inteligencia Artificial ejecutada desde el Edge, decide instantáneamente si el rostro que ha reconocido se puede desvelar o no en función de si el usuario ha dado su consentimiento para hacerlo. Esto guarda relación con el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR).
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— Telefónica (@Telefonica) 25 de febrero de 2019
