La Inteligencia Artificial ha sido de gran ayuda a la hora de desarrollar aplicaciones. Algunas de las aplicaciones más utilizadas están pensadas en la traducción de idiomas. Pero, ¿te imaginas una app dedicada a traducir una lengua que lleva extinta hace miles de años?
En 1799, el arqueólogo Pierre-François Bouchard encontró la piedra Rosetta. Lo que fue la clave para traducir el lenguaje de los jeroglíficos. Han pasado siglos desde aquel hallazgo y con la llegada de la Inteligencia Artificial podemos hacer ese proceso de una forma mucho más rápida. Nos referimos a Fabricius.
Traduce jeroglíficos gracias a Google
Desde 2018, Google ha estado trabajando para digitalizar lo aprendido con la piedra Rosetta para sacar a la luz una aplicación gratuita y de código abierto cuyo propósito es escribir y descifrar el lenguaje de los faraones.
Este proyecto ha sido llevado a cabo por Chance Coughenour, arqueólogo y responsable de Google Arts & Culture. Llegó a reconocer que esto comenzó siendo un experimento para comprobar el aprendizaje automático que tiene la Inteligencia Artificial a la hora de descifrar lenguajes extintos.
La única forma que existía para traducir los símbolos egipcios era recordar la imagen y sumergirte en diversos libros con el objetivo contrastar los datos porque hay que tener en cuenta que hay jeroglíficos muy similares entre sí y eso dificultaba su traducción. «Ahora con esta app acortamos tiempos. Si la imagen es buena, en 15 o 20 minutos tenemos la traducción, aunque todavía nos falta bastante para descifrar todos los símbolos», explicó Coughenour.
Accesible para todos
Esta aplicación esta pensada para todo tipo de usuarios, desde los especialistas en egiptología hasta los que pueden encontrar en la app una forma de entretenerse.
Al iniciar la aplicación, Fabricius te ofrece tres modalidades: trabajar, aprender y jugar.
La opción de aprendizaje nos explica los orígenes de la simbología egipcia, la modalidad de trabajar está pensada hacia usuarios especializados en la materia y en el modo de juego sirve para escribir y traducir textos propios. Además, la aplicación también proporciona temas didácticos sobre el arte y la cultura del Antiguo Egipto.
«Cuanta más gente utilice Fabricius, los algoritmos aprenden más y con el tiempo se convertirá en una gran alternativa. Solo es cuestión de tiempo y de entrenamiento», estas palabras de Coughenour dan a entender que cuánto más utilicemos la aplicación más completa se puede volver llegando a superar incluso a la propia piedra Rosetta.
La aplicación ya está disponible, pero en otoño está previsto que se implemente la aplicación en el Centro Australiano de Egiptología, institución que ha colaborado en numerosos proyectos como el que realizó con Ubisoft en el desarrollo del videojuego Assasin’s Creed: Origins.